25 de Agosto ha sido la fecha. ¡Terremoto! Messi le ha dicho al Barça que quiere irse. Me alegro por él, por el Barça y por toda la sensatez. Porque Messi necesita ahora un equipo ya construído y nunca las ruinas de la indolencia de todos estos años en Can Barça.
¡Hace bien! Y desde este modesto blog, solo puedo tener palabras de gratitud ante un tío que lo hizo grande todo. Hubiese sido lo ideal que se retirara donde empezó, que fue en el Barça. Pero la realidad y la inteligencia deben mandar sobre las dudas y las coyunturas.
¿Reprocharle yo algo al sucesor de Maradona? ¡Ni loco! Ahora en la despedida, lo que voy a hacer es recordar todo lo que nos dió a todos los aficionados a los que nos entusiasma esa manía llamada fútbol.
¡Siempre le recordaré! ¡Y seguiré disfrutando de su magia, se vaya al Inter, al City, o al retiro que le apetezca! ¡Me gustaría que ganase por fin su Mundial con Argentina! ¡Lo merece con creces! ...
Sí. Llevaba la "Pulga" el balón cosido a la bota, y no había forma humana de quitarle la pelota. Bajito y rápido, anárquico, genial, fastuoso, excelso, mágico, inigualable, goles a cientos, pases a capazos, talento a mil, imparable, el terror de las defensas de todos los equipos del mundo, el tipo que logró hacer olvidar un poquito a la excelencia de aquel equipo del Pep Guardiola semejante al Brasil de Pelé, y en el que destacaban todos y no solo él.
¿Cómo los del Barça no vamos a estar tristes si se nos ha ido lo más grande del mundo? ... Ya les pasó a los del Real con Cristiano. Se siente un montón de ausencia, de precariedad, de menoridad, de ganas de romper el pase o el abono televisivo, de irse del fútbol, de que no quiero saber nada de este puto deporte, de que ya nada será igual, y muchísimos de qués ...
Se va el Michael Jordan del fútbol. Muchísimo más de dibujos animados que Romario o Ronaldinho. Se va el más grande. Y, nos deja ...
Pero la culpa no es de Lionel Messi. El argentino nos ha dado todo lo mejor de sí, que es pura miel y caviar de fútbol. La culpa es de Bartomeu y de todos esos inútiles que no le han ayudado en los últimos años.
Lionel Messi sabe perfectamente lo que hace. Es dios. Y las cosas de las reconstrucciones no son su espacio ni su ilusión, cuando ya tiene treinta y tres años y además sigue jugando como siempre. Como el más longevo, genial y más grande que nunca he visto sobre un verde césped, siempre con el permiso de Diego Armando Maradona.
Lo dicho al principio ha de imponerse. Darle gracias por siempre y en todo lugar a Leo. A este gigantesco pelotero, bajito y serio. Darle las gracias porque me hizo salir de casa a un bar a verle, y porque me hizo reír y divertirme cuando los regateaba a todos él solito, porque me lo pasé bomba con su genialidad efectiva y su creatividad sin fin. Porque hay muchos porqués de agradecimiento. A pesar de que nos falta algo y nos deja en shock, le sigo dando las gracias y comprendiéndole a la perfección.
¡ME ARRODILLO Y LE LIMPIO LAS BOTAS, LEO!
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