lunes, 15 de julio de 2024

- TERNURA CÓMPLICE. -



 

Las manos se entrelazan desde el misterio tierno de los sentimientos de la aceptación mutua. Todo es un enigma en ella y en él. Sus dedos y sus deseos se exploran. Algo nace hermoso y evidente. Hay timideces y expediciones inexcusables hacia la ternura.

Él, teme no estar a la altura de la caricia esperada. Ella, puede que parezca más tranquila. Da igual. Se miran y se sonríen cómplices, obedientes y deseosos de reír y de romper a ser felices.

La noche del cine abre el telón de las intimidades. Y la oscuridad no le da brújula sino brillo y magnitud a la fila de los mancos. Porque todo el cine eterno siempre será el escenario perenne e histórico cuando recibe a la totalidad de una caricia y de los besos deseados. Nunca habrá remedio para que se abra la espita incontrolada de la felicidad.

¿Por qué se mueve la atracción? No sé qué le pasa a los dedos de las manos para que noten e inventen el placer puro y real. Él le coge a ella los dedos con temor a su inexperiencia y a hacerla daño, pero ella sabe responder afirmativamente al acierto y a la correspondencia. Y la mujer aprieta suavemente sus manos sobre los dedos del hombre que le gusta, y con su otra mano entrega su creatividad de afecto acariciando con gusto toda su piel. Y el hombre se siente más relajado que un zen tibetano, y ella sigue y sigue sonriendo confiada y con esa serenidad que da la apuesta firme y hasta absolutamente lógica.

Hay movimientos perceptibles y completos entre ambos. Y mucho misterio de vida que se mueve y que cristaliza con la precisión inevitable del afecto.

El roce de las manos por la piel, surgió desde los confines de la humanidad. Como todos los sentimientos reales de placer y hasta de supervivencia. De presente y de no pensar. De sentirse compartiendo algo que no tiene nombre porque es el resultado de la derivada de todos los epítetos positivos.

Los dedos siguen rozándose entre las dos manos. Se apresan y se disponen desde las individualidades que se gestan en una. Las caricias se tornan nerviosas inicialmente, y siempre creativas e íntimas. Después, llega la pura creatividad. Y todo se concreta en el placer de la relajación y de la sonrisa. La caricia es un lujo, algo sexy y espiritual a un tiempo; algo que se detiene por unos instantes para darse muchos besos espaciados pero siempre definitivamente felices.

Los otros, miran. Han de mirar. Y de envidiar. Y de respetar y desear que ocurra lo que está pasando a su alrededor, mientras rechazan y farfullan las mentes viejunas que ya no quieren vivir la cascada de la vida, sino odiar el presente feliz.

El y ella, están ajenos a todo. Se limitan a cerrar los ojos gratamente y a no decir ni una sola palabra, mientras por adentro solo son una máquina de quererse y de respetarse.

Vuelvo al dios del tacto. De lo imposible hecho conquista evidente. De que la vida empuja, y que la vida es un cañón de risas y de experiencias, de cosa fortuita y azarosa, sorprendente y esperada a un tiempo, como siempre será el deseo.

Es un deseo humano y no pensado. Es algo que aparece como un camino imparable como lo es el agua viva de un río. Ese agua, son los dedos entrelazados entre él y ella en el cine mágico de la intimidad y en lo cotidiano.

La teoría se cae a añicos y estrepitosamente. Los filósofos nunca podrán dar con la tecla, y los teólogos solo harán sonreír por menoridad e inconcreción. Aquí no se habla sino que se toca, se une, se cose, se besa una y otra vez, y hace de dos cuerpos uno nuevo y completo, en donde los censores de la moral mueren entre las barreras blindadas de lo imposible y quimérico. Vivir es un beso entrelazado en las manos, en la intimidad, y entre el consenso y el respeto de dos vidas que se miran.

¡SENTIRLO! ...

domingo, 7 de julio de 2024

¡¡ EUROCOCO !!



"Eurococo" no quiere fronteras ni distancias. Y entonces decide con su sonrisa hacer magia de colores. Se autobautizó con el nombre de "Eurococo" porque su cariño de humor hacia los demás, debería siempre extenderse como un Continente imparable de amenidad y de paz. A grandes cachos.

A "Eurococo" no parece gustarle la fama ni la notoriedad. Y actúa en los lugares más inesperados. Y siempre tuvo claro que sería payaso. Desde que vio a Popov, a Rivel o a Fofó, y a todos los payasos del mundo cuando niño.

"Eurococo" no tiene una edad definida, ni desea tenerla. Lo que quiere tener el payaso es la fuerza de la ilusión. Y, efectivamente, se muestra imparable en esa convicción. Él ve la televisión y contempla la sociedad. Siempre le ha gustado mirar las cosas de los otros y tratar de introducirse en todos los misterios íntimos de las personas.

"Eurococo" se maquilla con referentes actuales sin ceder al recuerdo de lo atemporal. Se disfraza y teatraliza, y es capaz de llamar la atención porque es la mejor manera de conectar con los otros. Niños y mayores.

"Eurococo" se acompaña con un sombrero de cuatro picos, y se pone a dar saltos. No trata de ser original. En absoluto. Solo quiere sacar su emocionalidad desde sus entrañas más profundas y reales. No es tonto. Porque un payaso nunca será tonto, sino todo lo contrario. Un payaso siempre será tan necesario como un bidón de oxígeno.

"Eurococo" parte de lo que ha aprendido, y a ello cose su forma de ser. Y entonces el hombre se pone a reír, y mantiene la risa , y homenajea a su manera a la tradición. Aunque es consciente de que el mundo ya es otro.

"Eurococo" se expresa a su manera. Y ríe sin complejos, y aprovecha la potente musculatura de sus brazos para sacar y crear figuras inesperadas y siempre excesivas e inhabituales.

"Eurococo" es exactamente imprevisible. Y cuando la gente le mira un tanto perpleja, entonces él les sonríe, y les ríe, y les llora, y tiene un gato amaestrado que hace exactamente lo que el payaso quiera.

Risas, más risas, hay gente que no sabe qué hacer al verle, otros le entienden a la primera, otros le llaman loco y que se calle ya, pero afortunadamente la gran mayoría le respeta, entre otras cosas porque "Eurococo" sabe hacerse respetar con su arte, tablas y experiencia.

"Eurococo" no hace música ni malabares. Solo los dibuja en el éter, hace como que está sonando la melodía o equilibrándose con unas bolas de plástico que flotan en el aire. Y en ese momento, algún niño ríe. Sí. Porque los niños siempre ríen, y tienen en su inocencia el tesoro potente de su grandiosidad.

Y los padres de los niños que ríen, miran complacidos y con cariño a sus peques. Y en el suelo, al lado de "Eurococo", hay una especie de gran bote por si alguien desea echarle unas monedas y en donde figura un cartelito en el que puede leerse: "no tires monedas si no te nace." ...

"Eurococo" sabe que la calle es el gran núcleo de las libertades. Que sin el ágora griega, casi nadie podría sentir ese placer del bienestar y del bien ser. La calle es para él, Europa, Asia, América, Oceanía y todas sus calles del mundo. Todos los lugares exteriores, son para sacar hacia afuera lo que pueda quedar retenido en el interior de todos los corazones.

A "Eurococo" le insultan más que antes, y el hombre mira con nostalgia un tiempo más generoso y tolerante con sus diabluras. Porque el payaso ve la vida con el alcance de un lince y la pasividad tranquila de un maestro budhini o de un filósofo.

¡"Eurococo" en acción! ¡Sus músculos hinchados aposta! Sus sorpresas con buen propósito. Su necesidad vital e imperiosa de que vuelva a las rúas la moderación, el sosiego y la naturalidad. Por eso "Eurococo" siempre está ahí. En acción. Incansable como un atleta de fondo. Misterioso como un ángel azul. Maravilloso como un atardecer o un abrazo. Encantador como cuando la brisa alcanza al fiero calor estival, y le quita la rebaba de su fuego y de su asfixia.

"Eurococo" siempre es imparable. "Eurococo" detendrá las guerras y los conflictos, los insultos, las agresiones, los malos pensamientos, dulcificará el dolor y le pondrá caramelos y olor a romero a los ambientes sucios que destrozan a los buenos olores de la paz.

A "Eurococo" le gusta el olor a tomillo, y le chifla la colonia de lavanda porque dicen que rompe los lugares nocivos de insectos rastreros y de todo tipo,y que purifica los espacios.

Que nadie crea que "Eurococo" es un monje o un cura. Lo que se siente el payaso, es un niño. Y que su niño interior nunca ha de parar, y así es capaz de impulsar la fuerza de sus honorables deseos. "Eurococo" es ateo aunque no lo dice nunca. Y si hubiera de apostar por un héroe o ídolo favorito y personal, sería por los reyes anónimos de la inocencia. Por los confiados, por los vulnerables, por los que tienen que crecer, por los pequeños que llegarán a ser siempre muy grandes; por la vuelta del optimismo y de todas las risas tan locas y maravillosamente contagiosas como la de su payaso capitán que conserva en su corazón.

"Eurococo" es un maravilloso loco que cree profundamente en que las semillas que lanza en arabesco, podrán germinar y fructificar. Y que esas semillas son tan imprescindibles como la cosa más inmediata, necesaria, estimulante o de supervivencia. Más que el comer o beber.

Estoy bastante de acuerdo con "Eurococo". Niños, mayores, o de mediana edad, deben reírse mucho más de lo que lo hacen. Y sentirse ellos mismos un coqueto juego de necesario encuentro de buen rollo. Y jugar los blancos a sentirse negros, y los orientales a ser mestizos, y los aborígenes a ser pelirrojos o colorados.

Esa es la gran idea de "Eurococo". La de cambiar el rumbo de la nave actual, la cual confunde la seguridad con la imposición, o lo correcto con lo justo. "Eurococo" es un payaso necesario, que busca las cosas aparentemente imposibles, para así hacer que se les caigan por los bolsillos las monedas fake a quienes deciden tener el monopolio de las verdades.

Mas nunca busquéis en "Eurococo" una vendetta, o un rictus de cabreo o de molestia. ¡No y no! En "Eurococo" solo podréis contemplar la templanza y el optimismo, y su nariz roja que se cae para dar paso a otra de color azul. O unos zapatos de tres tallas más grandes, los cuales se convierten en dibujos alegres de sus pies descalzos. Porque "Eurococo" es decidido y va descalzo. Quiere tener los pies en el suelo con la temperatura real del mundo aunque ahora sea fría, y no dejarse llevar por la incomodidad.

¡Allá va "Eurococo"! ¡Siempre irá "Eurococo"! ¡La calle será siempre de "Eurococo"! Y seguro que cuando "Eurococo" se enfríe y fallezca, otros nuevos "eurococos" habrán salido a su relevo y al poder de su esencial y bella heterodoxia.

¿APOSTAMOS AL SÍ?

 

sábado, 29 de junio de 2024

- BÍSEX. -



Bien es cierto que crecí en un ambiente liberal y todo eso, pero la presión social siempre está ahí. Mi cuerpo es el de un hombre. Así nací. Y mi sexualidad es la que es. A mí me gustan las mujeres y su encanto eterno. Cierto. Pero igualmente atraen mi interés y deseo, los hombres.

Y al principio, todo esto aparece como un sinsentido. Porque es como si la sociedad me obligara a definirme. O tengo que ser y elegir solo a hombre o a mujer.

No me ha sido nada fácil mi vida. Porque te estrellas contra un muro. Te sientes culpable, sucio, absurdo, extremadamente loco, tienes toda la sensación de ser un sátiro acaparador, un errado en las conductas, un promiscuo y casquivano, y todas esas cosas que a los heteros podemos parecer a los que somos y nos declaramos bísex. 

Fui a profesionales y me encontré de todo. Desde quienes intentaban llevarme a la vertiente masculinista, hasta los que no me tomaban en serio, o los que preguntaban si había sufrido algún trauma en mi infancia, o en definitiva los y las que seguro que estaban en que yo estaba definitivamente loco y que pobrecito de mí. Algunos me querían hasta dar pastillas y todo. Alguien me dijo que era una cosa suave y únicamente para dormir. Y yo, la verdad, es que siempre he dormido toda mi vida como un tronco y de forma natural.

¿Por qué no iba a afectar digamos esa normalidad social de lo no bi, también al gremio de los profesionales? También ellos son producto del conjunto social. Bien es cierto, que alguno y alguna entendían lo de la bisexualidad y afirmaban aceptarla, pero siempre me dio la sensación de que una cosa es la teoría, y otra la práctica. 

El que sientas atracción por los dos sexos, te condiciona. Porque tu mundo no es el que se propone. Yo me he enamorado de Juan, y también lo estuve de María y de Montse, pero al final, cuando fueron descubriendo mis inclinaciones sexuales y apartadas de las uniones convencionales, las personas que he citado me dejaron. Y no solo me dejaron, sino que imagino que contarían su experiencia conmigo a otras personas, con lo cual me temo que mi digamos reputación, no debe andar boyante por ahí. Me llamo Claudio, tengo cuarenta y dos años, mi aspecto es el de un varón de mediana estatura, y soy profesor de filosofía en una Universidad.

Mis relaciones, desgraciadamente, suelen acabar pronto. En cuanto se enteran de que me van por igual los hombres que las mujeres, se asustan y me dejan. 

Últimamente, os confesaré que estoy ilusionado. He conocido a Luisa, y parece que tiene una mente amplia y clara. Y que no se escandaliza con mis cosas. Y hemos pactado una amistad, y que si un día me ve con un hombre, entonces lo entenderá y continuaremos siendo amigos.

No sé lo que aguantará Luisa nuestra relación. Es muy maja e inteligente, y yo confío, pero también sé el desconcierto que puede producir mi orientación sexual y mi personalidad, en otras u otros. Lo que sé es que soy bisexual, pero no soy el estrangulador de Boston, ni Jack el destripador, ni Drácula, ni el fan de las bacanales o de las orgías romanas, ni estoy obsesionado por el sexo, ni deseo hacer daño absolutamente a nadie.

Fijaos, que al final de mi historia, mi naturalidad me lleva y me obliga a ser comprensivo y tolerante con todas las personas, sean mujeres u hombres. Su desconcierto o sus dudas me parece que pueden estar bien, y que nuestra vulnerabilidad como especie es a veces un bien y hasta una buena característica personal.

Como veis, no he entrado en detalles íntimos ni en sexualidades, ni en besos, ni en caricias, ni en sexo, ni en camas. Para mí, todo eso no es suficientemente destacado para ser mencionado.

-SOY COMO LOS DEMÁS.-
 

lunes, 17 de junio de 2024

- FERMÍN NO SE ENCUENTRA. -



De Enguídanos me confiesa ser el viejo Fermín, mientras espero sentado en un banquito a que abra un bazar de chinos. Hora pues, temprana, soleada, agradable y primaveral. En ese mismo banquito, un hombre discapacitado trata de hacerse entender además de con su gestualidad y afán.

El viejo Fermín, parece conocer al discapacitado. Ambos se saludan y sonríen. Y a continuación Fermín me aborda con naturalidad. Me nota tranquilo y decidido, y decide confiar en mí.

Se le nota a Fermín el acento y hasta el sobrio porte y estilo conquense. Y sobre todo, que ya él se siente pasado. Porque su presente parece demasiado previsible para no notarle agotado de vivir.

Fermín es bastante alto, corpulento, paleto, incapaz de salir de sus apriorismos y estigmas, y me empieza al  contarme su vida, que un día en su Enguídanos pudo ver y tratar a su prima Concha. Llegó la postguerrra Civil y la necesidad, dejó de resinar en los pinos de su pueblo natal, y se afincó en Castellón en donde se casó.

Un día, tomó el tren de Castellón y se escapó a Valencia con un único objetivo: encontrar a su prima Concha. Yo diría, que más que su prima, la tal Concha fue realmente su verdadero tiempo de amor y deseo. Concha, podría representar tal deseo, la libertad, la búsqueda de la vida de la capital valenciana, el Mercado Central, la calle Ruaya, la Plaza de la Virgen, y otras mil cosas diferentes. Fermín nunca logró encontrar a Concha.

El hombre corpulento, campesino y campechano, trufa sus decires con pausas para él inevitables. Y Fermín mira con deseo a todas las guiris turísticas que se van acercando con sus móviles y faldas cortas y talles esbeltos, para visitar sus zonas más destacadas y gozar así con el clima del calor y del tiempo del sol.

Fermín ríe con ironía queda, y se dirige al discapacitado, hablando de las mujeres como si fueran hembras objetos de deseo sexual y jaleando su cuerpo. Su represión es el postfranquismo y su gran fracaso personal. No ha sido feliz con su mujer. Yo, le espeto a Fermín:

- "¿Y logró encontrar usted a su prima? ..."

Y un no breve y conciso, sella la respuesta a la pregunta directa. Fermín no solo no logró jamás  encontrar a su hermosa prima, ni aceptar que no fuera su cantinela de que todos los políticos son unos mentirosos que solo están ahí para llevarse los dineros y para dar por saco.

¡Franco! ... Mientras le esucho y me cuenta que no tuvo suerte en la vida y que ya es mayor para tonterías, Fermín confiesa su vacío y soledad sin querer. Me asegura que hace tres años que murió su mujer y que para él ya todo terminó hace tiempo.

Fermín ha tirado la toalla. Si su líbido sigue en pie, se buscará cuando ya no pueda más a una prostituta y se relajará en la cama. Pero su llanto interior no cesará. Fermín forma parte del ejército de hombres sin esperanza, el cual irá tirando por las calles turísticas, intentando pasar lo más desapercibido posible. Y cuando el calor empiece a arrear, entonces se meterá en su piso de Valencia donde quizás haga la siesta, y se pondrá todos los partidos de la Eurocopa de fútbol 2024.

Nunca verá a Concha, ni gustará de hacer amigos de verdad, se siente inactivo y acabado, vive en otro mundo que ya no existe, cuando España meta un gol lo cantará fuerte en su salón comedor, cuando suene el Himno nacional meditará sobre su juventud, y siempre pensará que su vida pudo haber sido otra cosa si no hubiera nacido en Enguídanos, si hubiera escuchado mucho más la música de Perales, si su mujer no hubiese sido tan coñazo de tía, y sobre todo si su prima Concha hubiera sido por él localizada.

Al lado del Mercado Central de Valencia, a mi lado y al lado de un conocido suyo que sufre discapacitación, Fermín ha vomitado su tremenda y oscura soledad. Un volcán de vómito vital, una sensación de absurdez emocional, un puñado de pena, y un porte elegante, elocuente, pero aparentemente contenido, práctico y castellano. Su España, su ser y su salud, apenas le importan.

-SOLO DESEA VER TETAS DE GUIRIS. -

 

lunes, 10 de junio de 2024

- C. ALCARAZ ASALTA PARÍS Y SUCEDE A NADAL. -



"Juanqui" Ferrero miraba con fijeza a su pupilo de El Palmar. Le orientaba, le aguantaba, le contenía, le frenaba; le quería ... Carlos Alcaraz comenzó el Torneo francés, a lo grande. Había vuelto la apisonadora de la virguería y de la ilusión. Alcaraz estaba juguetón y rutilante. Tennis Lover.

Pero el murciano estaba más maduro y realista. Ya no sonreía por cualquier minucia efectiva, y cuando le salía la sonrisa ya era para la concreción. Parece haber crecido y haber encontrado más caminos que su juego meramente lúdico y espectacular.

Quedaban muchos marathones. Palizas cada dos días, de cuatro y hasta cinco horas. Así son los Grands Slams. Verdaderos infiernos de resistencia, dolor, sufrimiento, épica y esfuerzo inevitable.

Carlos machacó a Tsitsipas. Jugó un partido bello, pero frente a un veterano de orgullo. Esperanzó ver a Carlitos inasequible a las cosas del griego. 

Lo malo se antojó definitivamente exigente. Ahora ya era el one Jannik Sinner. Y ahí, Carlos, empezó a generar sus brillantes polémicas de juego enloquecido y de cine de aventuras. Fallaba, ganaba, se frustraba, no jugaba del todo bonito, pero nunca descomponía el rictus de fe y de confianza. La paliza que se metieron el español y el italiano, tuvo cosas sorprendentes. Alcaraz no negaba errores, pero también vivía en los aciertos y en los jugadones imposibles. Había de todo.

Juan Carlos Ferrero, "Juanqui", se consagró como gran líder de maestros de portentos tenísticos como el murciano de veintiún años recién cumplidos. Y miraba a su Alcaraz, diciéndole algo que marcaría su andadura hasta la conquista de su primer grande sobre arcilla: "¡Disfruta sufriendo!" ...

Esa frase, se lo marcó el murciano de El Palmar en sí a sangre y fuego. Ser él mismo podía significar jugar menos vistoso, no rendirse a las primeras con muchos sets desfavorables, ir a remolque con fe y hasta frescura; que las palizas físicas y mentales podían valer la pena. Y esto solidificó opciones. Porque ya no era cuestión para derrotarle el que no estuviera brillante y meramente estético. Pasar de sex symbol a hombre duro...

Y sacó un 10 cuando doblegó a Sinner, en un partido de una tensión tan potente como favorable. La gran lección de victoria, le dio a Carlos la idea de la esperanza optimista y positiva. Por éso, cuando le llegó la final contra el fortísimo Zverev, daría la sensación de que las premuras ya no serían para el as español unos obstáculos definitivos. Podían aparecer muchas más cosas.

Ferrero siguió observando con profesionalidad y rigor, orgulloso de su precoz maravilla tenística. Y vio en él, algo, mucho más que el juego genial. Ahora, Alcaraz podía ufanarse de ser estratega y hasta friote, sin que por ello fueran a mermar sus posibilidades.

Carlos Alcaraz hizo que pasaran cosas. Muchas más cosas diferentes que antes. Ha conquistado su primer Garros sin hacer un tenis de magia continua, pero siempre teniendo en cuenta que podía ganarles a todos mientras hubiese un juego por en medio. Daría igual si fuese por delante o por detrás de sus rivales en el marcador. Lo importante era el cacho del marathón, de las cuatro horas, del límite físico y mental, de los desfallecimientos, y de la nueva gran sonrisa interior que ahora ya posee Alcaraz.

Rafa Nadal puede estar más que satisfecho. Ha conseguido que su legado lo haya entendido un compatriota jovencísimo, jugando a las todas y a los límites sudando como un cosaco, e incluyendo los golpes winners que llevan la calidad y el efecto inmediato.

La Chartrier se sintió honrada por este mozo que ha llenado la más carismática pista de tenis, con una sucesión de intensidades y emociones. Alcaraz gana su primer torneo loco y más consistente. Lanzándose ganador sobre la tierra batida, y como homenajeando al mito Rafa con su pose brillante y definitiva de gran campeón. Ya hay más cosas que Wimbledon o el US Open en su zurrón.

Sinner debe estar mirando ahora los progresos del español, y pensando cómo poder contrarrestar las nuevas cosas del mago murciano de El Palmar. Porque Alcaraz sigue a la suya, y ahora con más eficacia y personalidad. Con más recursos, frialdad y convicción. Habiendo demostrado que puede salir de cualquier lío y ganar.

¡¡BRAVO, CARLOS!!


 

miércoles, 5 de junio de 2024

- PRIMERA NOCHE JUNTOS. -



Te empeñaste en decirme varias veces por waatsap, que tus padres no estarían ese finde. Y yo te pregunté si se habían escapado por ahí para ver mundo. Y a ti te hizo gracia la palabra mundo. Mundo, mundo, mundo ...

- "Sí, mundo. Je,je,je,je,je ¿Mundo? Ji,ji,ji,ji,ji,ji ..."

- "¿Qué pasa con Mundo, Isa? ..."

- "¡Nada! Je,je,je,eje .. Mundo, mundo ..."

Como todos los viernes noche, quedamos en la cafetería habitual en donde la pandilla de amigos llevaba ya tiempo esperándome. Isa, no sabía que había estado ocupado toda la tarde viendo vídeos de enamorados y todas esas cosas. Ni que me había comprado en la farmacia mis primeros preservativos, ni la vergüenza que me había dado hacerlo. Salí de dicha farmacia, más rojo que un tomate. Pero, muy decidido. Hacía dos días que había cumplido diecisiete años, y sentí que llegaba un momento diferente de mi vida.

Isa era como un gato cascarrabias, mi primera amiga especial, siempre se reía, sabía mirar maravillosamente cuando se quitaba sus gafotas de miope, y era magia cuando la cogía su melena por atrás y jugaba a hacerla trenzas y juegos de diabluras. Me gustaba el pelo de Isa. Era tan suyo, tan personal, tan exuberante, tan de niña mala, que no podía evitar acariciarlo.

La cena de esa noche, fue muy especial. Casi no me enteré del bullicio ni de las risas de mis amigas y amigos. Mis ojos solo eran para Isa, y como era tan bobo y tan insistente mirándola, entonces Isa jugó a no hacerme ni puñetero caso, si quitamos a unas tremendas carcajadas que soltaba al mirarme tímidamente de soslayo. Quería desconcertarme y hacerme sufrir. Probarme. Estábamos los dos muy nerviosos. Tanto, que no nos atrevíamos a hablarnos de nuestras cosas. Pero yo, esa noche había salido muy dispuesto de casa. Era el momento de moverse, de probar, de cambiar, de dejar los apuros a un lado, y de permitir que una nube de la vida nos llevara a Isa y a mí en la dirección que el viento quisiera. Y de repente y delante de todos, va y me suelta Isa:

- "¿Tú no sabes que los chicos les escriben cartas románticas a sus chicas, Rubén? ..."

- "Sí, Isa. Sé perfectamente que lo hacen. Ja,ja,ja,ja,ja ..."

¡Uf! ¡Menos mal! Isa también se rió. Y me cogió una mano y ya no me la soltó. Acabamos de cenar, y esa noche mi chica y yo les dimos esquinazo a la pandilla. No habría discoteca night. ¿Y qué? ...

Recordaré hasta que muera aquella noche. La cogí por la cintura y la fui llevando hacia las calles bien cercanas a la casa en donde ella vivía. Y llegamos al portal y ella me miró y soltó:

- "¿Me has llevado aposta a la puerta de mi finca? ..."

- "Sí, Isa. ¿Mola, no? ..."

- "Venga, Rubén. ¡Subamos! Pero no sé yo sí ..."

- "¿Subimos, Isa? ..."

No nos miramos hasta llegar al interior de la casa. Me dijo que nunca antes ningún chico había estado allí a esas horas de la noche. Parecía asustada y feliz a un tiempo. Yo, entre otras cosas, pensaba en mis recién comprados preservativos y en no perderlos.

Vía fácil. Comenzamos a besarnos. Hacía calor. O, mejor dicho, teníamos calor. Abrí la puerta de su habitación, y ella me dio una fuerte patada en el trasero. Y otra más suave, y otra .. Y yo le decía a Isa que me diese cientos de palmadas en dicho sitio y en donde quisiera.

Teníamos ganas. Al principio me sentí tenso, pero Isa me ayudó y se quitó la mini. Y con su mini en mis bolsillos, fue todo más fácil. Lo hicimos con casi toda la ropa puesta, e Isa corrió al armario y puso sobre la cama un par de toallas. Lo demás, fue precioso, orgulloso, placentero y cómplice. Estuvimos besándonos hasta el amanecer. Y mucho más que besándonos. Fuimos un solo cuerpo de dos. Lo pasamos sexualmente de cine. Y nos dormimos como dos más que amigos más que felices.

Cuando me desperté, ella seguía durmiendo. Me gustó mirarla cómo dormía. Cogí mis zapatos para no hacer ruido y le dejé a Isa un mensaje en su móvil apagado, diciendo que era la mejor y maravillosa.

Ya en la calle y camino de la casa de mis padres, encendí ahora mi móvil y estaba lleno de reproches y desacuerdos. Me tiraron los míos una bronca monumental al llegar a casa. Hasta que mi madre le dijo a mi padre que solo eran cosas del amor.

-Y TENÍA RAZÓN.-

 

lunes, 27 de mayo de 2024

- "TREPIDANTE" .-



Orondamente bella. Exuberante y desubicada. Tiene cara de miedo evidente que trata de anular con extrema coquetería de mujer. ¿Qué hace ahí sentada en un asiento bajo una marquesina como lo haría una adolescente al uso? Demasiado atractiva para ser normal o habitual.

Trato de indagar con la excusa de la tardanza del bus, acerca de su persona y circunstancia. Y ella parece ir sabiendo que ya no está en su terrible y demoledora Colombia dividida, y que aquí puede abrirse un sueño.

Lleva una falda de reina leona, y su escote es excesivo y descomunal. Es más que bella, pero anda en shock. "Post traumático", me confiesa. Y me dice sin que casi le pregunte nada, que ha huido de la guerrilla de su país, y que ha logrado llegar a España hace nada, y que la protege una O.N.G.

Y por fin, sonríe como una tenaz hembra, y sus ojos impresionan. Porque nunca desvelarán que tiene muchos menos años de los que aparenta. La bautizaré como "Trepidante", porque la mujer ha vivido tan de cerca la muerte y la obstrucción absoluta de su sexualidad y de su libertad, que su relato nervioso y aventurado me recuerda a una balacera maldita de Cali o Bogotá. La mujer está próxima a una tragedia que parece querer detener su vida y su futuro. Me mira desconfiada, hasta que me ve hablarla con respeto.

No tengo ni idea de quién será realmente la hermosa "Trepidante", pero está todo el drama del mundo en su hablar, que trata de ser inútilmente sosegado. Está destrozada de dolor, extraña en sí misma; sin saber muy bien cómo es que le pasan las cosas que le están pasando. Es como si no hubiese podido todavía ordenar su horror.

Me dice que yo debo ser un profesor, y agradece mi cercanía. No sé nada de "Trepidante", pero estoy seguro de que de pequeña ya estaba en las guerras de su país herido y dividido. Parece en el fondo orgullosa, valiente, audaz, esposa de un gran jefazo, y señora de bandera que hasta pudo atesorar mucho poder. Por eso juega a ser medio prostituta y provocativa. Porque quiere seguir siendo una reina en el cetro de los infiernos exteriores y extremos.

Afirma que le siguen los pasos sus paisanos para acabar con ella y con su hija, que el otro día le robaron los moritos toda una carpeta llena de documentos de legalidad, y que no hay un árabe bueno. En cambio, los españoles somos otra cosa más dulce y suave ...

"Trepidante", me hace sentir a Pablo Escobar, a huidas y escapadas a la velocidad del vértigo, a las luchas de muerte en su país, al cactus, a que ha debido de hacer algo gordo quizás defensivo, y que no se fía ni de Petro ni de Boric.

"Trepidante" es mujer en guerra. No se puede ser más atractiva y adivinarle cara de niña si deja el pavor. Conoce una línea de bus. Esa línea la llevará a la sede de un piso que gestionan sus amigos solidarios de la ejemplar O.N.G.

En "Trepidante", veo la guerra muy cerquita, que ha salvado el cuerpo de milagro, sangre derramada a charcos muy cerca de su recuerdo, vulnerable como en una lid de odios desgarrados, la grandeza y el sucio odio de la fraternidad en su paisanaje. Sí. Veo a la Colombia que sacan poco por la tele, que es exceso, que casi enseña las tetas para esconder tras su alma un revólver de venganza.

Cuando le digo que debemos tomar líneas distintas de bus, ella duda en mirarme con complacencia o con rechazo. Debe estar harta de quedar bien con quienes la ayudan. No sabe quién seré yo, ni puede imaginar ahora quién es ella mima, está sudando, me dice que le gusta el calor de mi ciudad, que en donde esté el verano que se quite el invierno, que la vida es algo único, y que está de todo hasta los ovarios. Y luego vuelve a sonreír deslumbrante.

"Trepidante", me sorprende. España, Europa, todavía sigue siendo un paraíso y un remanso de paz para quien vive la intranquilidad, en el vaivén, en la ambición mutilada, en el afán del contraataque, en la angustia de que maten a su hija y a ella misma, y que se le acabe todo casi en el anonimato.

Siento en "Trepidante", el sabor molesto de las devoluciones en caliente, y el camino hacia la nada. La niña hermosa no debe volver al terror. Es una nena potente y vital. Es un ser que precisa de oportunidades.

¡DE VIVIR!
 

viernes, 24 de mayo de 2024

- PITOUN ENTREGÓ DOS CAPAZOS DE PLANTAS. -



Al límite de sus emociones en arco iris. Como pariendo una necesidad y un bien. Jacques Pitoun ama a sus plantas. Las cuida y se entretiene viendo cómo van dándole y dándose vida. ¡Sus plantas! ¡Los tesoros vivos que acompañan a Pitoun! ...

En su balcón ya no puede tener más. Se le terminan los espacios. Pero además, el hombre sabe que las plantas son vida. Que dar vida es una gran oportunidad para mostrar su faceta de generoso, que comparte, dador; de sacar para afuera aquello que ama.

Pitoun ya no es joven. Pero, lo fue. Su juventud fue vida arrebatadoramente vital. Machacó sus músculos hasta el paroxismo huyendo de su miedo, en busca de glorias deportivas irreales y ficticias. Pero, sigue fuerte. Pitoun continúa teniendo un espíritu fuerte, y una pasión quizás heredada por el cuidado de sus plantas.

Está nervioso Pitoun. Se siente un rey mago incomprendido, el cual camina hacia un Centro de beneficiencia, en donde le recepcionarán sus macetas, y seguro que servirán para hacer feliz a alguien. Y Pitoun lo está. Feliz y muy nervioso. No está acostumbrado a dar vida a los demás, aunque esté fuertemente convencido de que una planta natural y cuidada por él, no es una planta más. Es muchas cosas de su vida positiva y animosa que sacará de la persona que la disfrute muchos sentimientos escondidos interiores.

¡Alós! ... Pitoun le entregará siete plantas a un tal Alós. No quiere saber quién es el tal Alós, porque Pitoun está con ansiedad, con el rictus crispado, con la cabeza bajita, y con una profunda convicción interior de que está y va a hacer una cosa bien hecha.

El camino hacia el Centro benéfico es corto. Está cerca de donde vive. Pero sus rodillas están lesas por el paso del tiempo, y las siete plantas que transporta pesan mucho, y debe hacer tres paradas para descansar antes de llegar a su destino.

Pitoun está como enrabietado, pero hay algo en él mucho más potente que su sudor y sus nervios: su buena intención.

Pitoun sigue disimulando su jadeo sonoro y sigue hacia adelante. ¡Siempre hacia adelante! Y cuando llega al Centro que acogerá y distribuirá sus plantas, Pitoun está afectado, ansioso, feliz, se siente libre, y también tímido y más que pudoroso. Además, Alós no está en ese momento.

El guardia de seguridad del Centro, le pregunta a Pitoun qué desea, cuando llega el hombre a la puerta del lugar. Pitoun logra decir:

- "¡Sí! Yo soy el de las plantas. ¿Está el señor Alós? ..."

- "¡Espere un momento! ¡Siéntese en esa silla! Yo le aviso ..."

En el Centro benéfico, hay mucha actividad solidaria. Pero Pitoun no desea ser asociado a la beneficencia, sino al más puro y coqueto anonimato. Quiere irse de allí lo más pronto posible y serenarse.

Una trabajadora del Centro, se dirige a él, y le indica si desea esperar a Alós, o si por el contrario puede ella misma entregar las plantas al hombre cuando regrese. Y Pitoun le dice a la mujer que sí, que bien, que vale, que perfecto, que fenomenal, que no se preocupe ...

Y ya Pitoun va regresando de vuelta a su casa. Sin peso y con el corazón sosegado, y el espíritu en retorno de sosiego. Ha valido la pena, todo. Intentarlo, ser generoso, enfrentarse a la adversidad, superar obstáculos, y hacer una buena obra. Bien empleados han estado su ansiedad, sus sudores, sus apuros, y los brazos doloridos por el peso de las plantas. Y Pitoun deja de sudar, y siente paz.

-Y MUCHO GOZO. -
 

lunes, 20 de mayo de 2024

¡ I LOVE YOU, POGACAR !



¿Eddy Merckx?, ¿el nuevo Merckx? No lo sé. ¡Ni me importa! Me es indiferente. Tadej Pogacar es ahora el ciclismo emocionante. Ya sé que Vingegaard está recuperándose, al igual que Evenepoel o el portentoso veterano Roglic. Lo sé. Soy consciente de que también hay otros dioses que se disputan y se reparten la Vuelta, el Giro y el Tour. Pero, no son lo mismo de lo que Pogacar representa.

Yo, me siento ante el televisor para ver una etapa de super montaña, y quiero disfrutar a pierna suelta. Y quiero hachazos, cambios de ritmo, regularidad y locura. Sé que Vingegaard es regular o que Remco es estrepitosamente bueno, o que con Roglic no me voy a decepcionar. Pero también sé, que cuando le llega el turno televisivo a Pogacar, sé igualmente que la nerviosidad genial va a poder con el academicismo de pinganillo de los directores. Por eso entre otras cosas, es que hago este elogio de la locura del ciclismo maravilloso.

De este deporte sé bastante desde Pantani, Perico o Contador. Sé que me gusta la alta montaña ciclista, porque hay tipos que son capaces de no tener miedo a la cordura, y que pueden levantar de las sillas a un país o a un aficionado sin fronteras.

El Giro de Italia, ha vuelto. Era, lo de hoy. Era lo de los Alpes de la etapa más dura y cabrona, cuando tras doscientos y pico de kilómetros y el Mortirolo por en medio, aún quedaban muchos más puertos y muchas más pendientes, y rampas que se acercaban al 20% de porcentaje. Era el escenario italiano y primaveral del gran deporte de los gigantes de la ruta. Era el momento más oportuno para volver a seguir teniendo fe en el ciclismo.

Por eso, y en la etapa mágica y llena de fresco, y arriba toda la nieve que llevaba desde Manerba del Garda hasta Livigno, esa fe del placer de la heróica ciclista iba a tener lugar. Montañones superando los dos mil metros de altura. ¡Alpes del este! ¡Magia! ¡O ganas, o llega el "tío del mazo" y te manda al olvido y al fracaso! A la decepción ...

Pasaban los kilómetros. Unos valientes marchaban por delante, y parecía que todo iba a ser una etapa sin guerra ni balas. Todo marcaba una distancia constante que oscilaba entre los cuatros y los cinco minutos de ventaja sobre el grupo de la maglia rosa en el feudo del pequeño príncipe Pogacar. Algunos se mostraban escépticos y hasta críticos con ciertos conformismos e inmovilidades en carrera. Pero, ¡se equivocaban! Tadej Pogacar la iba a liar. ¡No iba a consentir que accedieran a su etapa reina! En donde baila el mito con la leyenda, y se junta el pasado con el futuro. En donde el espíritu de Bartali, Coppi, Bahamontes, Merckx, Fuente u Ocaña, se une a la magia del frustrado pirata Pantani. ¡De éso, nada! ...

A falta de 12 kilómetros de Livigno, el ciclismo de ataque volvía como un titán al corazón y a la alegría de los grandes y buenos aficionados de esta utopía que se vuelve realidad como es el ciclismo en ruta, y que te hace vulnerable y tan genial. ¡Oh, yes! ...

Y entonces, la magia de Pogacar se puso en acción. Una máquina de 176 centímetros, que sube como una pluma y sin esfuerzo, fue atrapando a todos sus rivales. Les alcanzó a todos, superó al sabio escalador Nairo Quintana, y llegó tras unas paredes de escándalo al placer de la meta. Ha machacado su Giro de Italia 2024, y nos ha hecho felices a aquellos que amamos la épica frente a la digitalización de la estrategia.

No tengo ni idea de si el rápido y delgaducho Pogacar, llegará a ser mejor o peor que Eddy Merckx. Es como el dilema de comparar a Pelé con Maradona, pasando por Messi. ¡Es lo de menos! Lo que sé, es que estaré pendiente del genio de Pogacar y de sus próximas carreras y exhibiciones.

¡PORQUE ME GUSTA ESE CICLISMO!


 

domingo, 19 de mayo de 2024

- LA PALOMITA. -



Tere la vio el otro día. Iba por la calle y divisó una pequeña palomita oscura, la cual, o bien se había caído de un nido, o bien se había dañado unas de sus alas y no podía volar. Quizás ambas cosas.

No dudó Tere. Adora a los seres pequeñitos y desvalidos. Y decidió tomar a la palomita entre sus manos, guardarla con cuidado en su bolso, y subirla con ella a su casa.

Pensó Tere en su tranquila gata Tona, y le dijo a su manera y a su modo que no le hiciese nada a la palomita. La gata Tona y Tere, parecen saber comunicarse. Dicha gata salta de la cama de su dueña para desperezarse un poco. Casi siempre está confortablemente acostada.

Tere ha pensado cosillas para que su nueva amiga la palomita, pueda recuperarse y salir hacia adelante en recuperación. La mujer le habla a la paloma con extrema suavidad y cariño. Y también con firmeza de supervivencia. Y moja un poco de pan en agua y hace miguitas, y luego las introduce entre el pico sorprendido y receloso de la palomita. Después, Tere idea meterle agua en la boca ayudándose con una jeringuilla de plástico. Se pasa horas intentando sostener el hilo vital de la palomita con su presencia y ánimos.

Después, toma al animalito leso, y decide meterlo en una pequeña gatera. Así podrá defender a la palomita de las tentaciones de la gata, cuando ella haya de salir de la casa.

Hoy Tere ha abierto la gatera. La palomita parece muy tranquila. Mucho más que en días anteriores. Eso puede ser una buena señal. O, no. Ya se verá. Lo que pasa es que se nota en la palomita más vitalidad y calor. Con más confianza y menos miedo de ser alimentada. Tere la besa en la frente y no repara en mimos. Es como una madre para la palomita. El animal, parece sentirse más que satisfecho.

Tere, no es muy consciente de las cosas que hace. Pero su conducta es de sensibilidad extrema. Cuando ve a niños y a niñas peques, les dice cosas cariñosas y nunca les dejará de obsequiar con su sonrisa, la cual crea la nueva sonrisa de sus jóvenes y orgullosos padres. Y le pasa lo mismo con los perros. Raramente un can la deja indiferente. Todos tienen algo especial. Unos son grandotes y poderosamente hermosos, y otros son cachorros o razas pequeñas y más que graciosas criaturas para Tere. Y entonces es la excusa perfecta para hablar con sus dueños brevemente.

¿El futuro de su nuevo amor?, ¿de su palomita débil y enfermita? Eso está por ver. Ya se verá. Ahora lo más importante es que pueda recuperarse. A Tere le motiva cuidarla. Entonces, alguien interrumpe sus sueños y le dice:

- "¡Pero, Tere! Las palomas propagan muchas enfermedades. Si se pone buena, entonces deberás sacarla de casa, abrir las manos y dejarla volar ..."

- "¿Eso tendré que hacer? ... Porque, aquí no sé si la podría tener todo el tiempo y ... Pero, bueno ... Esperemos de momento que no se muera y eso ..."

- "Sí. Claro, Tere. Pero las palomas han de volar. Hacer su vida ..."

- "Pues me será un poco duro si la tengo que dejar volar ... Pero bueno, será un tiempo. Y luego se me pasará ..."

- "¿La dejarás volar a la vida libre si se recupera, Tere? ..."

- "Sí. Claro. La vida. Lo que pasa es que si está bien aquí ... Habría que ver un poco ... No sabemos qué va a pasar ..."

Tere tuvo una infancia de espanto. Su vida quedó siempre marcada. A pesar de todo, tiene claro que todo sigue y ha de seguir. Da y necesita dar mucho cariño. No tiene un pelo de tonta, pero sabe hacérselo. Así puede seducir y hasta salirse un poco con la suya. Su memoria es delicada, y su ternura es vital. Quiere ser la mujer más independiente y dulce del mundo. Aunque bien pocos puedan entenderla.

-SU MIRADA ES AGUDA Y TRANQUILA. -

 

lunes, 13 de mayo de 2024

- ESE TIERNO MUNDO. -



Me complace acompañarle a un mundo costoso y arriesgado para él. Porque el mundo de Artur es diferente, defensivo, temeroso, personal, orgulloso y profundamente tierno.

Artur es ternura. Ha de resistirse a salir de su caja mágica en la que casi todo parece hacerse automáticamente. Artur es inteligente y realista, le gusta la Historia, los tebeos y los silencios de su ostracismo.

Consigo sacarle de su casa en blindaje personal autodestructivo. Puede que salgamos a dar un paseo por su parque cercano, por satisfacer a los suyos. Por complacer a los demás. Porque se establezca en su interior una fuerte y delicada lucha entre el placer y el deber. Porque no pueda entender lo que en el fondo, entiende. 

Le dejo. Le dejo que elija espacio exterior. Que decida él, el sitio para la experimentación y la exploración. Trato de ser auténtico con Artur. Es lo mejor y más eficaz que se le puede hacer. Y por tanto no le voy a sermonear acerca de las ventajas y beneficios de cambiar sus sensaciones habituales de los peligros del exterior. Y prefiero mostrarle sonrisa y naturalidad. Si le sermoneo acerca de los placeres de algo que le preocupa, entonces se va a tensar, a impacientar, y a decidir concluir de mala gana y enfadado, su audacia que también es un esfuerzo evidente.

Lo voy consiguiendo, pero temo fallar y fallarle a Artur. Una vez en el parque, Artur me mira como indicándome la ruta a seguir. Pero yo le niego la iniciativa, y le digo que me guíe él. No le voy a robar ni un centímetro de su iniciativa. Porque esa iniciativa es tan suya como su libertad, la cual es hoy por hoy dubitativa y extraña para él. A Artur le cuesta sentir libertad más allá de la puerta de la casa en donde vive.

Artur mira inicialmente su reloj. Tiene claro que solo será una hora de reloj el experienciar el exterior, y yo nunca estoy tentado a decirle que sigamos caminando un poco más. Sería un error craso.

Lo que realmente yo deseo es que Artur coteje sensaciones. Que pueda pensar que en un cachito de la calle también puede haber bienestar y satisfacción. Que en las ondas de su ser, se pueden abrir paulatinamente unas mutaciones en las cuales no todo sea oscuro y un no de dolor e inseguridad. Mi mejor apoyo, será mi parte serena. Sé que Artur es una esponja.

Ternura hay en ese chico de cincuenta y en su biomecánica nerviosa y desentrenada. Me evoca a los niños chicos cuando anda muy deprisa y descoordinado. Dudo al principio sobre Artur y estoy tentado a decirle que no corra tanto porque no hay prisa. Me callo y le dejo entrenarse. Poco a poco se va acercando a mi paso sin que yo se lo pida.

Le noto a Artur la falta de costumbre en el andar. Sus piernas, su tren inferior, está tenso, deficiente de ritmo adecuado, como esos nenes que aún no pueden aprender a caminar correctamente sin supervisión. Los músculos de sus piernas y su cuerpo entero, están raros en dicho movimiento. Aún se desconoce a sí mismo cuál debe ser su mejor manera de moverse y de desplazarse. Y me doy cuenta de que su ejercicio no es tanto el técnico como el natural. Artur sabe andar, pero aún no lo recuerda bien.

En su bonita y personal alma, el hombre está pendiente de que vaya finalizando la experiencia y está ansioso por volver a su zona segura, a su espacio tranquilo del que no sabe vislumbrar del todo que es amenazante y más que talón de Aquiles para su pleno vivir. Pero eso es lo que conoce.

Artur y yo, vamos llegando de vuelta a su casa. Por dentro se está debatiendo entre su sudor de temor y por la posibilidad de un mundo nuevo que a lo mejor no le traiga el bien y le aterrorice.

Al llegar al portal de su casa, Artur me da las gracias. Es en extremo educado y agradecido. Me dice que le ha gustado el paseo. Confío yo en que pueda repetirse, y en que no lo haga por mí o por no defraudar.

Lo que me gustaría es que Artur se lo dijera todo lo bueno a sí mismo, y que valorara sereno las realidades. Es lo mejor que puedo hacer por él. Que asimile que afuera de su mundo temeroso y de ternura, puede que haya algo más.

-Y QUE NO ESTÉ MAL. -
 

martes, 7 de mayo de 2024

- SE FUE EL "FLACO" MENOTTI. -



Ese acento nuevo entre el racismo ancestral. De cuando en España se les llamaba sudacas. Ahora, se les sigue llamando. En aquellos años del planeta fútbol español, parecía demasiado audaz que alguien que no fuera intelectual o político sudamericano, pudiera sentar cátedra.

Luis César Menotti tenía una personalidad y una convicción estética del fútbol, que aquí podía sonar a rollo esteticista. En mi país, se ha valorado siempre mucho más el deporte de coraje que el de la finura y elegancia. "Lentos" "¡Esos son lentos" "¡Hay que correr más!" ...

¡¡Menotti!! Ese modo de hablar de un tipo delgado, con melena, patillas, pantalones acampanados, y mirada aparentemente crítica al menos antes de empezar a esgrimir la valentía y la osadía de su oratoria. ¿Poesía? ...

La reticencia nunca decayó del todo. Pero los curiosones del fútbol y aquellos que le queremos como nadie, el discurso de Menotti nos empezó a maravillar. Tenía lucidez estética en su apasionado verbo que descifraba a nuestro fútbol desnudándoles las claves. ¡Nada de bilardismo esperado! ...

L. César Menotti fue un extraordinario vividor. Vividor de bon vivant, de sereno enfant terrible, de cambiar los entrenos para la tarde para aprovechar la bohemia de la belleza de la noche festiva, de asombrar a muchos con su puntería reflexiva, o de ser en Argentina un sucesor mediático de los grandes dioses de la literatura o de la nostalgia infinita por el peronismo.

Menotti se anticipó a muchos al darse a conocer. Lo suyo del fútbol era claro. Su convicción hacía escuchar hasta a los que le discrepaban. Para el sabio futbolístico de Rosario, el fútbol era tocar el balón, técnica, darle velocidad al juego, o jugar al ataque y sin conservadurismos absurdos y temerosos.

Menotti cambió la idea del fútbol en Argentina, y creó un nuevo estilo que fue ganador, elegante, habilidoso y estético. Y no anduvo con miramientos a la hora de exponer libremente su idea. El mejor jugador del mundo del fútbol no había sido ni Maradona ni Messi, sino O Rei Pelé. Sí. El negro brasileiro había mostrado todas las genialidades de la inventiva. Para Menotti, siempre argentino, la resolución de la excelencia estuvo clara. ¡Pelé! Pelé hacía exactamente lo concreto del pensamiento creativo que te aparta de la mediocridad o de la duda. Y, poco a poco, en España, Argentina, y mil lugares futbolísticos más, Menotti llegó a ser escuchado, respetado, validado y considerado.

El "flaco" nunca fue complaciente y no lanzó una sonrisa de más. Afirmaba por otra parte, que muchas veces era mejor el empeño que el azar resultadista. Que el fútbol no era una cosa de velocistas del atletismo, sino de saber llevar una pelota, de ser capaz de mandar en el centro del campo, y de jugar y hacer jugar a los demás. El fútbol debería ser elegancia estética y apuesta por el juego abierto y ofensivo.

Menotti fue uno de las últimas leyendas de un tiempo que ya se va porque se cambia de generación, y entonces otros toman unos relevos azarosos. Guardiola escuchó a Menotti. Y Valdano. Todo el mundo le oyó. Muchos, admiramos su claridad conceptual. Y tenía la varita mágica de apoyarse en la experiencia de cuando fue jugador. Por eso no llevó al "Pelusa" a su Mundial patrio del 78. Porque el "flaco" elegante, mostraba audacia y algún escepticismo evidente ante la crítica periodística.

Sé que todo el mundo sabe de fútbol, ha sabido de fútbol, y siempre sabrá de este deporte tan popular y universal. Y precisamente por eso, destaco la figura carismática de quien hablaba con tono de fumar muchos cigarros y con aire de no sorprenderse demasiado por las cosas del balón redondo.

Su figura es larga e inolvidable, y los tiempos actuales tienen la cualidad evidente de la fugacidad. César Menotti nos habló y muy brillantemente de sus claves del fútbol. Y le escuchamos, y sentimos el talento de alguien diferente, ¡che!

- D.E.P. -

 

domingo, 5 de mayo de 2024

- EL REAL MADRID, ¡CAMPEÓN DE LIGA 2023/24!



Plácidamente y sin incomodidades. El Real Madrid ha sido el equipo más sólido y resistente de la Liga de fútbol de España, y ese factor compacto y de regularidad ha sido más que suficiente para su nuevo éxito.

La frescura física de un equipo con carisma, estrella y españolismo, ha ido dejando atrás y con seguridad a todos sus rivales, los cuales esta temporada apenas han sido y estado. Con la sonrisa sorpresiva de una extraordinario Girona CF, el cual hizo tres cuartos de temporada de admirar y no parar.

Vinicius ha sido el gran nervio ofensivo del Real. Un carioca excéntrico e inmaduro en lo personal, pero que ha logrado exitosamente salir de sus continuas protestas en el césped, y reivindicando la idea evidente del racismo deportivo de mi país. Vinicius ha vuelto a ser decisivo. No tendrá gol suficiente, pero su inventiva convierte los balones que toca en propuestas inmediatas de peligro letal e inevitable.

A su lado, Rodrygo ha dejado atrás los minutos de suplente, y ha conseguido hacerse con una indiscutible titularidad. El inglés Jude Bellingham ha mostrado sangre fresca y precoz, y ha sorprendido por su calidad y desparpajo. Camavinga ha convencido a muchos y les ha sacado del escepticismo con esa calidad atlética de jugador incansable que necesita todo equipo para tener opciones de expectativa de éxito. Como el trabajo constante y para enmarcar, del defensa ofensivo Dani Carvajal. Ha sido el Madrid un equipo rápido y de atletas, capaz de aguantar mucho más que nadie.

En definitiva, que el éxito del Real, se cimenta en una extraordinaria dirección técnica y deportiva, la cual ha acertado plenamente en los relevos de los más veteranos, constituyendo un bloque correcto, con un banquillo exuberante, y casi con techo ilimitado, contrarrestando de este modo las limitaciones técnicas por el paso de los años en Modric o Kroos. El Madrid ha tenido hambre y fe, todo el año. Y más mérito tiene su logro, dado que el mejor portero del mundo que es Courtois, no ha podido estar en la mayor parte de la patria competición. Admirable la capacidad del equipo blanco, para disimular las carencias, y para convertirlas en seguridad y hasta en excelencia. ¡Alirón! ...

El FC Barcelona ha vuelto a defraudar. Su plantilla no posee la calidad suficiente, y eso es definitivo. Ha debido depender de detalles individuales, o de los espoleos de su entrenador Xavi Hernández. Nuevo fracaso por falta de competitividad liguera. Cede su campeonato vigente, al Real.

Fue una temporada de ruidos, de polémicas, y de V.A.R. De fracasos tecnológicos como el que impide que no pueda verse si un balón ha entrado o no por completo dentro de una portería, o de unas reglas de juego que no parecen favorecer lo que deberían, y que dejan en el escepticismo al futuro de tales avances.

Hubo y hay un racismo evidente y,-aunque siempre es lamentable-, ha servido para poner visibilidad a esa energía de supremacía frente a otras razas que existe lo mismo en España que en Europa, y contra la que hay que seguir luchando.

Lo decía al principio. El Girona FC, ha ilusionado y le ha puesto sal a un más que exigente torneo liguero, que para mí será siempre el más prestigioso aunque los grandes titulares y elogios se los lleven los millones de la Champions League. Las eliminatorias son breves y directas, y la Liga es una competición constante en la que has de estar concentrado y exigido muchísimos meses al año. ¡Nueva gran gestión de jugadores del veterano entrenador Carlo Ancelotti!

Muchos meses, en donde en todos los campos españoles han habido pasión y goles, y errores y aciertos, y tertulias de periodistas de fútbol encontrados y forofos en muchos momentos. Y esto del periodismo forofo, es algo bien preocupante. Parece ir in crescendo lamentablemente.

Concluyo, afirmando y expresando mi felicitación y aplauso a un sólido y rápido Real Madrid, que este año ha ganado con holgura a todos sus rivales patrios. Es ese Madrid laureado casi hasta el mito, cuyos éxitos sin techo se acercan a los cielos del fútbol de aquel Barça de Mr. Guardiola, y que permiten crecerse y bien a los millones de seguidores que tiene el equipo que preside Pérez.

¡¡ENHORABUENA, CAMPEONES!!

 

domingo, 28 de abril de 2024

- LIBROS, LIBROS, LIBROS ... -



Si te metes en un libro, te puedes socializar. Si vives lo que lees, te sumergirás en un universo imparable de sentires. Un libro siempre es emoción, aventura, pasado, futurísimo, mentira, excelsa verdad, dinámica, fortaleza, cielo, infierno o apuesta ...

Un libro es rugby y fútbol, y danza clásica, y confidencias, y pornografía, y libertad, y viajar a donde te dé la gana sin moverte del sofá. Libro es vida. Libro son deseos, y haceres reales e imaginados. Libro es el dios todo. Todas las emociones que alguien ha podido desarrollar, o perfeccionar, o ajar, o precisar, o detener, o vivenciar o renunciar.

Libro es un gol, o un campo de golf, un golpe directo, un marathón, un bar costumbrista, un ritmo, un estilo, una divulgación, un peligro, un regalo, los ojos de tu amada, la sonrisa de tu atleta, la crónica subjetiva de alguien que decide crear, o el me da la gana de cualquier persona que decida escribir algo sobre unas páginas.

Libro es ser médico a palos, doctor House, auscultar, palpar situaciones y decidirlas. Libro es hacer dudar, acojonar, hacer un milagro, convertir unas ideas en una medalla de oro, un papel en una sábana, hacer de un mago un labrador, de un influencer un filósofo, o de un pobre de favela un millonario sin fronteras. Porque libro es libertad.

Libro son las memorias, o las ostias en las Redes, la historia de la primera cópula sexual, el primer beso, la fórmula sagrada de la cocacola, la descripción y etimología de tu anatomía, la grandeza y la menoridad de la Historia, los agudos grises y matices, el rescate apresurado de los sin voz, el imperio de los que casi siempre ganan, las cosas de tu chucho, el aullido del mudo, la excursión al espacio interior o exterior en una creación científica, la revolución cultural, o la asunción de que el universo se expande contínuamente como dice Hawking.

El mundo del libro es el mismo que el que llena al ser humano de materia versátil, una enciclopedia sobre la lencería femenina, una poesía acerca del horror, lo que te puede pasar en una mazmorra si estás capturado y torturado; un escupitajo a la justicia o a la injusticia. Libro son ideas majestuosas o retorcidas, el respeto que nos hace grandes, la dualidad con sabor a bombón o a sal, el mapa secreto para no ser demasiado ambicioso, la amargura, la tentación para hacerse rico en dos tardes, la pretensión de que nunca aspires a ser el mejor, un erotismo cuidado e intenso, la colección de los mejores zapatos de tacón de siempre, los fantásticos mocos de un chica ideal, de cuando el mono se hizo animal actual, cuando se dice que Dios nos creó y lo sabe todo de nosotr@s, o como cuando alguien afirma que únicamente la duda metódica sería siempre nuestra mejor brújula existencial.

Libro es basket, y reunión de intelectuales, y lonja de la seda, y radio sin sonido, o alma que se da a la bebida, o brujas buenas que nos dan ternura, o infancia rota, o la historia de un sucio violador, o el análisis de una apuesta argumentativa, o la carta de un jefe de secta menor, o una sucesión de gags con letra, o lo que siempre deseaste leer y no pudo ser, y el triunfo de la sorpresa sobre la desesperanza, o la autoayuda de la primavera, o la gran decepción, o la previsibilidad y su amigo el aburrimiento.

El libro está ahí. Digitalizado o analógico. Se hacen Ferias hermosas en su presente y homenaje, y a veces cuando hay mala leche se le quema en las hogueras para decir un no. Los cajones están llenos de libros explosivos y de tabú, de volúmenes censurados entre el dolor y la indolencia, y los insectos se apostan y hacen hábitat entre su superficie y todos los recovecos.

Sí. El libro eres tú, y tu chica, y tu torero matador, y la actriz por la que darías un brazo, o la búsqueda sana e incesante de la felicidad. Libro es una planta ilustrada, una vuelta a las andadas, el Tour de Francia, un recuerdo casi imposible de un tipo que nunca existió, piratas, impostores, canallas o santos elegidos.

Un libro es dios. Tiene todas las posibilidades como asimismo el diablo, es lo que nos diferencia y une a un tiempo entre nosotros y las demás especies. Libro es Darwin, y es humanidad, solidaridad, humanismo, márketing intruso, el mago Potter o Don Quijote.

Libro es la Biblia del sueño, el amuleto y el bolso, el solfeo, la cultura, la ciencia fusa e infusa, nuestro profe particular, un intruso en el ascensor, el vademecum, los tebeos que nunca te dije; libro son tus ojos y mis manos. Libro es amor, y Guerra y Paz, y la posibilidad de detener tus pensamientos en unas cuartillas propulsadas por la máquina del padre Gutenberg.

Libro es mi beso, y tus pupilas al leerme, y tus lágrimas gozosas, y un triple de Air Jordan, y cuando pasas de mí o te produzco extrañeza. Libro es todo aquello y mucho más de lo que puedas imaginar. Y tú puedes crear más complejidades a poco que te lo propongas.

-PORQUE LIBRO SIEMPRE ES UNA MÁGICA INCÓGNITA. -

 

jueves, 18 de abril de 2024

- ÚLTIMAS TARDES CON RAFA NADAL. -



La tarde en Barcelona sigue suave y atractiva. Primaveral. El torneo del Godó ya es de nuevo de arcilla; de tierra batida. Rafa Nadal juega en su casa y en su pista, y contra su cuerpo y contra su nostalgia.

Son tardes de despedida, de homenajes, de adiós, de golpes geniales del señor "Vamos", y de un amargor brillante de tristeza. El pueblo tenístico espera expectante la espectacularidad, la consistencia, el juego sereno y eternamente fondista y ganador.

Rafael saca la personalidad y el empaque. Se le nota inactivo y escéptico; como pasando las hojas de su libro tenístico póstumo. En el fondo, todos y cada uno de nosotros queremos que se pare el tiempo, que la lesión abdominal no exista, que sus rivales no sean tan jóvenes ni dinámicos, que no sean los postreros clínics del genio gladiador de Manacor, que la burguesía y la afición catalana siga admirando su figura épica y heróica, que los guiris que abarrotan la Ciudad Condal sigan la estela de los partidos de uno de los mejores tenistas que el mundo del tenis ha conocido.

El cuerpo de Nadal está nublándose, cayendo la noche, a veces quiere salir el sol, y no tenerle que ver excusándose en las ruedas de prensa por la causa que sea. Le admiramos, le queremos, le quisimos, le querremos, aprenderemos de él su garra de no querer sentirse en el ostracismo del Olimpo, le homenajeamos, besamos al mito que nos ha hecho felices, hacemos fuerza para su resurrección y más victorias.

Nadal quiere ser competitivo. Despedirse, con la más digna decencia en su última estación que podrá ser Roland Garros o incluso los Juegos Olímpicos. Debe ser duro. Es duro ver que Cronos el "fuckker" le tiene tomada la medida y el último torneo, el último juego o el último punto. Seguimos admirando, -lo haremos siempre en una pista-, a Rafa Nadal. En realidad, las cosas son lógicas. Hasta el más precoz de sus seguidores se va haciendo mayor, a algunos nos salen canas, a otros las primeras novias o incluso los primeros divorcios o separaciones. C´est la vie ...

La vida, sigue. Estas últimas tardes con Nadal demuestran que todos seremos vulnerables, y nos jode que pierda, que no se gire con la agilidad de antaño, que ahora los dioses huelan a Sinner o a Alcaraz, que "Nole" cada vez se queja más, o que Tsitsipás o Medvedev empiezan a ser meros outsiders.

El tiempo no es cruel. Rafa, cede. No importa. Alguna lágrima se escapa. Pero no es de rabia. Es de realidad, del hoy, del paso del tiempo, del pensar  en aquellos caramelos de tardes brutalmente competitivas que el señor de Manacor nos ofreció durante varias décadas. 

Sí. Décadas jugando al tenis. Décadas de Roland Garros, décadas de Wimbledon, del Open USA o del de Australia. El tiempo, sigue. Ese espectador del tenis siente las últimas tardes de alguien que ha sido especial. Dan ganas de llorar a mares, de que vuelva la épica, de que la victoria solo sea una parcial emoción, y sobre todo, besarle con fuerza a través de unos extraordinarios aplausos por su tenis.

¿Decepción? El transcurrir del tiempo es decepcionante cuando has sido Dios. El Dios de la raqueta se emociona y se enfada. Va asumiendo que el resto de la vida de Rafa no puede ser el tenis. El tenis ha sido él. Ahora, ya no nos va quedando el Rafa guerrero, sino el Rafa real.

Sabemos que Nadal está bramando contra todos los dioses que parecen tirarle al barro de la no competitividad. Es humano. También y como todos, Rafa también es humano. Desde Barcelona, el mito manacorí sigue tras perder, firmando autógrafos. Pero por adentro irá una procesión de rayos y truenos de impotencia. En estas últimas tardes de Nadal, nos embarga la pena y la sorpresa, el sueño de que aún pueda hacer algo enorme y cosas así.

¿POR QUÉ NO SOÑAR EN QUE AÚN QUEDA MÁS? ...