Únicamente el Sevilla F.C., pareció mostrarle este año alguna seriedad de pugna, pero el equipo de Lopetegi no tuvo continuidad y empezó a deshincharse.
Ha sido para el Madrid una Liga cómoda y a la vez, exigente. Porque el vasto calendario, hace que los jugadores deban afrontar un número excesivo de partidos. Y mantener el nivel, tiene un enorme mérito y merece todos los elogios.
Este Real Madrid, ha encontrado en su entrenador Carlo Ancelotti, a un tipo que ha sabido manejar el vestuario con suavidad y a la vez con personalidad. Y conciliar egos nunca es nada sencillo. Hacer que los jugadores saliesen al campo sin envidias ni malos rollos, ha sido un éxito más que notable de un hombre tan experimentado como "Carletto". Ha sido jugador, y ha sabido colocarse en la piel de los suyos.
Es un Madrid con orgullo, casta, y con alguna individualidad de primor. Porque el hombre del año, de la Liga y de todos los eventos madridistas, no ha sido otro que el francés Karim Benzema. El delantero, ha completado una temporada absolutamente fantástica, y al Madrid le ha venido de perlas. El galo, se perfila como futuro Balón de Oro. Realmente, ha estado majestuoso y decisivo.
Otro pivote del Real Madrid, ha sido su guardameta Thibaut Courtois, el cual ha completado un concurso absolutamente impecable. Se ha consagrado definitivamente como uno de los mejores porteros del mundo, y ha dejado sus dudas en el atrás.
El coqueto brasileiro Vinicius, ha subido algunos escalones más en su prestigio futbolístico. Porque ha sabido combinar su habilidad y desparpajo, con la concreción de los goles. "Vini", no es un goleador ni lo será, pero a veces no queda más remedio que anotar si no quieres que tu carrera se estanque. Y Vinicius le ha abierto muchas puertas de alegría al ataque eficaz de su equipo. Su caché es ahora mucho más prometedor.
No ha hecho el Real un juego brillante o espectacular. Ya no tiene jugadores para ello. Y ha decidido suplir dicho brillo con solidez, consistencia, orgullo, y una enorme capacidad de reacción ante la adversidad. Ha tenido fe y mentalmente ha sabido aguantar.
El Atlético de Madrid se perdió entre guerras y loas a su juego, que capitanea el dios Simeone. Y la falta de regularidad le apartó del objetivo liguero. El Barça sigue en construcción. Un equipo derribado por una gestión directiva demencial, parece haber sido sobreponerse con un gran entrenador psiquiatra como Xavi, y está a punto de lograr puestos de Champions.
La Liga, es y ha sido para el Real Madrid. La número 35. Y en el fondo, esta competición casera y nacional, es la más exigente. Porque tienes que estar todo el año dale que te dale, porque todo se hace marathoniano y agónico, porque siempre hay lesionados y ausencias, y porque la competición liguera es ajena a todo esto.
El Madrid, festeja por la Cibeles y con todo el bullicio primaveral y post pandémico con su afición exultante, la cual sale a las calles a clamar como nunca. El Bernabéu sigue en obras, pero entre tanto el equipo de Florentino ha sabido levantar la Copa de una Liga más.
¡ENHORABUENA!
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