Mirada guapa y clara en una voz de volcán africano. Eras la sucesora de Aretta y de Donna Summer. Has sido la mejor cantante de América de los últimos tiempos. Sin discusión.
Cuarenta y ocho años de lava potente y mágica. Tu vida ha sido como el tiempo más brillante y espectacular de tu ser, Witney. Has hecho la mejor película del apogeo de tu vida. A todas y a todos nos has enamorado. ¡Enhorabuena a tu embrujo!
Sí. Witney Houston acaba de morir a los cuarenta y ocho años a causa de las putas drogas, y de las adicciones anímicas que ello conlleva.
Witney ha sido música y voz, la reina de los discos y de las discotecas, y América. La novia negra de América, sucesora de Aretta y Donna, y casi pariente por edad con el mito Michael Jackson. Saludos a Amy Winehouse.
Houston era una negra que cantaba en godspell y en el coro de las iglesias. Como tantas otras ex hijas de esclavos africanos en ese Continente americano del money y el business. ¡Oh, América!
Sí. Cuarenta y ocho años llenos de belleza, de juventud, de talento y magia en la voz, de luz maravillosa imparable, que conquistaste todos los países y continentes. Toda la Tierra cayó a tus pies, encantadora luna y fugaz Witney.
Un genio negro hecho mujer. Fuiste, la mejor. Ya lo dije. Pero me gusta repetirlo por si alguien sordo no lo sabe y no pudo paladear la clase y la potencia de tu voz. Sí. La gran afroamericana, nos dejaba a todos con la boca abierta. ¿De dónde te venía tanta potencia en la voz? Deberé preguntárselo a los astros. Exactamente, Witney, lo que tu fuiste: una enorme estrella. ¡Star!
La has diñado con cuarenta y ocho años, Michael Jackson, Elvis, Amy.., ¿qué demonios os pasa a los genios?, ¿sólo es que lo sóis, y que no podéis ponerle barreras a toda vuestra libertad buena y mala? Me temo que va por ahí ...
Las drogas, el refugio recurrente, la sensación de que vienen los ocasos en medio del núcleo de las estrellas, el devenir, y la santa tontería. Ya lo has conseguido, Witney. Ya has logrado elevar el mito. Eres la superestrella mundial con muerte prematura. ¿Lo deseabas así?, ¿seguir asombrando y emocionándonos incluso después de muerta, Witney? Nunca lo sabremos.
Estados Unidos y el mundo. The World. Todos. Todos lloran y lamentan el triste y precoz final de la gran diva Witney Houston. Desde Japón hasta Francia, desde Borneo a los Andes, desde la Costa Este hasta la Oeste de la sensibilidad musical. Éxito y emoción pluridireccional y mediática. Sur, Norte, contenido y continente. ¡Oh, my Lord!
Todos los telediarios y noticieros, se cortan e interrumpen, para dar el fatal notición prematuro de tu óbito. ¡All! ¡Todos! Has triunfado. Has vendido todos los discos que te ha dado la gana, los Grammys que hicieron falta y todo eso, pero últimamente se te puso en la cabeza que no podrías ser grande y feliz si no le dabas a las drogas y al mal hábito.
A mí me gusta la vida y la música, Witney. Tu voz, tu música y el son emocional de tod@s. No me gusta que se apaguen las voces que imitan a los pájaros y a los truenos. Nunca me gusta demasiado el silencio. Prefiero siempre una melodía, unos ojos vivarachos, o una gran canción hermosa.
-LO QUE TÚ FUISTE PARA MÍ-
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