Una excelente noticia para el fútbol. Vuelve a ponerse el mono de trabajo, el gran maestro y ex entrenador del Barcelona, Pep Guardiola.
Globalización del fútbol. Nuevos retos. El fútbol y sus grandes creadores. Recordar lo que hizo el Pep en Barcelona, es evocar una magia absolutamente impresionante. Sin parangón. Su genio, queda para la magna historia del fútbol de clubs. Se hinchó a éxitos y se hizo mito. Ascendió al Olimpo de los trainers elegidos.
Y parece que su sangre de fútbol, permanece en él. Tras un tiempo sabático, el noi de Sant Pedor, acapara todas las grandes sorpresas y portadas de los diarios deportivos. Retorna el gran mago del jogo bonito, que nos ha hecho soñar durante tantos años poniendo en práctica un concepto del fútbol de posesión y de ataque. Un fútbol enamorador, estético y de antología. Fantástico.
Ahora, viene Alemania. Y, no un equipo cualquiera. No. El equipo más potente y carismático. El Bayern de Münich en el que triunfaron tantos cracks. El primer club de Alemania. El equipo de Franz Beckenbauer o del "Torpedo" Müller. La gran bandera del fútbol teutón de clubs. Un grande entre los más grandes de Europa.
Sí. El Pep, en Alemania. Un español, en una Liga bien diferente, en la cual el estilo es otro. Alemania es un país frío climáticamente, y en cuyo fútbol predominan el atletismo y la enorme potencia física. Los panzers.
¿Será capaz el fino y estilista mago Guardiola, de encajar en un estilo menos estético y más de fuerza y tesón? Quizas, ésto, es el primer gran reto que acepta y que excita a Guardiola. El trasladar su idea de fútbol al Bayern, y lograr aceptación y resultados. El Pep es tan grande, que no me extrañaría que lo lograra.
Porque en Alemania y en todos los sitios, existe una máxima común. El fútbol es inteligencia. Es, movimiento rápido del balón, tenencia, inciativa y distribución rápida del cuero. Este deporte es de conjunto y nada egoísta, y hay que recordar que en el sensacional Barça de hace cuatro años, jugaban bien todos. No había apenas nadie que destacara sobre los demás. Porque, Pep, logró construír un gran bloque y una gran idea.
Guardiola, irá a Münich con menos presión. Será para él un juego, porque bien es sabido que ya ha demostrado aquí en España con creces que es muy grande. Que, poco tiene que demostrar.
Por éso, parece evidente que el fútbol llama a la puerta personal de Pep, como una llamada de deseo imparable. Nunca puede estarse quieto. Siendo un crío, ya animaba desde el banquillo de los juveniles. Un líder. Un culo inquieto y genial, que asume la aventura de la continuidad de su prestigio en otras tierras y distintos lares.
Guardiola se hace internacional, porque el fútbol lo es y lo ha sido siempre. Guardiola no se va a Alemania a por dinero, sino a hacer lo que mejor sabe que es ejercer el oficio de entrenador.
Y surca otras fronteras y otros paradigmas, y no baja el pistón y se va al poderoso Bayern, y sigue ahí en medio de la gran competición, y se le seguirá con lupa a este españolito catalán osado y único.
Algunos, estarán deseando que fracase y se la pegue. No es mi caso. Y creo, que el de poca gente. Porque aquellos que amamos el fútbol, hemos recibido una excelente noticia. ¡Vuelve el gran Guardiola! Y éso quiere decir que van a pasar cosas, y que seguro que vuelve a sorprender y a dejar con la boca abierta a más de uno. Porque el Pep es un tipo especial, mesurado, frío, calculador, tranquilo y ganador. Siempre mágico.
- ¡MOLTA SORT, MESTRE! -
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