Libertad femenina en la noche de las audacias del deseo eterno. El misterio de mujer hecho luz, que sale de las sombras para componer un brillo incomparable. Pestañas de ojos inmensos que convierten la felicidad de la mirada en un reto. Luna de Eva, trozo de señora que luce viva sus señas imborrables de misterio.
Luna femenina. Luciérnaga con tacones y blonda, sirena que nunca duerme esperando a su fornido marinero heterodoxo y enamorado, ángeles de amor que vuelan por los sueños mágicos de un charme y de una sexualidad acogedora y siempre enamorada. Flores silvestres y sensatas. Sorpresas de fuerza y melena, cuerpo de curvas y óvalo, ganas de amar, vivir y viajar. Tú. Mujer.
Medias enfundadas en unas kilométricas piernas de seda y fantasía. Piel suave y sin vello, que causa la tersura de un despertar exquisito y deseado. Descanso y sueño de mujer. Señora hasta la médula, que cruza las piernas y cambia todo. Labios rojo pasión que se abren en una sonrisa arrebatadora, y la luna que se mete entre las ventanas de la alegría y del relax. Gracias por ser fresca y bella. Sabes dar.
Coqueta, pizpireta, eterna, diversa, conversa y hasta despistada. Diosa robada, feminista, y tertuliana de los sueños suaves que dan la admiración. Minifalda ansiosa al mirar de un hombre, andares de rosa generosa con escote afirmativo de palabra de honor. Fe de belleza y de fresa. Frescor en toda tú.
Playa de vacación, hilo dental, gafas de sol que te hacen ser la reina del anonimato y de la bella seña inesperada. Isla del archipiélago de la noche, en donde entre las luces de una noche de plenilunio juegas a ser toda la dueña de la samba y de la sensualidad que llevas en tí. Tabúes y sostenes a la hoguera purificadora. Risotada entre los siete saltos mágicos en las horas que dicta el trébol de la noche caribeña y de San Juan.
Luna de luz y ligueros, cancán de actriz americana y siempre deliciosa, gimnasio de sudor y starlett de Cannes. Madura de pelo corto y de millones de mundos devorados. Nueva dama que se renueva en aventura propia, y que se lleva todos los piropos en forma de silbidos de admiración. Belleza de luna y amor de rompe, rasga y libera. Hermosura, sí. Toda.
Cita de luna en un hotel apasionado y desesperado, sueños hechos, y sudor de deseo entre las confidencias de un camarero que te sube en deshabillée un caramelo de fresa y de amor. Luna que te mira con cara de diosa envidiosa.
Entre la punta de tus pies y el final del pelo de tu cabeza, se muestra un cuerpo especial. Un cuerpo que sirve para sentirte que hay espejos que reflejan en muchas ocasiones una belleza imparable. Por éso eres luna y gata, mensual y hasta cíclica, deseada y familiar, diaria, eficiente y culta, mujer y más aún que mujer, admiración de los hombres divertidos y sabios, y exhuberante fuente de inspiración para los animosos poetas de la bohemia y del desorden versado y hasta ido. Atractivo y fatal.
La noche en luna de seducción. Luna de señora, de lady, de fraulien o de femme. Hembra maravillosa, y chica con olor a tomillo y a romero. Cercana, cálida, maestra, investigadora, periodista, mágica y ejemplar. Coqueta, y siempre elegante y distinguida. Identifícate finalmente ...
Dama de noche, que me gustas a la sombra de la luna y de tus ojos grandes. Relax de paz y de ilusión a las cuatro de la mañana y hasta a las cinco de la tarde. En todo momento y lugar está la luna de una mujer aunque no se la pueda divisar. Siempre anda ahí la fragancia de un gran deseo y éxito, que camina firme y descalza exactamente hacia donde le da la gana.
-ADMIRADA LUNA FEMENINA-
2 comentarios:
Como en un sueño donde todo es realidad.. se mete uno en esta lectura y se siente luna.. dama ..gata .. cercana .. cálida y en resúmen una reina de los sentimientos y de los sentidos... es bonito..
Elef Neshicot..
Mil besos, querida amiga, por comunicar tus sentires personales al escribirme este comentario tan femenino como encantador, amiga.
Besotes y Elef Neshicot!
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