Un gol en el descuento nunca es agradable de encajar. Y más, cuando se lo meten a todo un campeón mundial y europeo como España, el cual se ha acostumbrado a ganar siempre.
España y Francia empataron a un gol en el estadio Vicente Calderón, en partido clasificatorio para el Mundial de Brazil.
Fue un encuentro emocionante, diverso, cambiante y con sobresaltos. Muchas lesiones musculares, en un campo ancho y propicio para las cabalgadas y los contragolpes. Dormir el partido y tener el balón en un césped resbaladizo y muy extenso, no es nada fácil de lograr. Y ya se se sabe que España es sobre todo, el balón y su tenencia voraz.
Sí. Muchas lesiones. Silva, se lesionó muy pronto, y España le echó de menos todo el partido a pesar de la excelente primera media hora de la "Roja". En ese tiempo, Sergio Ramos había abierto la lata francesa, al rematar a la red tras cabecear inicialmente al palo el formidable defensa sevillano y del Real Madrid. La cosa, parecía ponerse de cara. Y más, cuando Pedro fue objeto de un claro penalty que Fábregas marró. Y al filo del descanso se anuló un gol a los "bleus", mucho más que discutible.
La segunda parte, fue otra cosa. A España le falló el oxígeno, y comenzaron las pérdidas de balón y los peligrosos correcalles. La France comenzó a ganar presencia y posesión, y los siempre peligrosos Benzema y Ribery, pudieron aparecer y crear peligro.
España, intentaba sin éxito dormir el cuero y el partido, pero se encontró además con demasiado espacio entre líneas, y eso se notó y mucho.
La selección, no hizo un mal partido. Estuvo seria y peleona la escuadra de Del Bosque, pero ayer no fue día de tiki-taka o juego de alarde. No era el caso.
Puyol y Piqué no podían estar en el centro de la zaga, y ello suponía que Busquets se retrasara en el centro defensivo, al lado del contundente y más que seguro Sergio Ramos. Y cuando Busquets no está por el centro del campo, el equipo nacional va a tender más al desequilibrio. Y los genios bajitos lo notan más. Tras la prematura lesión de Silva y luego Arbeloa, se vió que Iniesta tenia la magia de vacaciones y que Xavi Hernádez necesitaba muchos más apoyos.
Arroba, Pedro estuvo tan rápido y bullicioso como desafortunado. El canario lo dió todo, le hicieron un penalty, es actualmente el tipo más incisivo del área, y hay que respetar los progresos crecientes en su juego y en el Barça. Lo malo es que hay poca dinamita cerca del área contraria, y que Torres sigue encallado en el medio de su fama mediática. Villa ha de volver y sin duda. El tiempo es largo, y además hemos ganado un Europeo sin un nueve. Que, ya es de mérito.
Cuando el sufrimiento español sonaba a sonrisa de éxito, el galo Giroud hizo el empate final a uno. No estamos acostumbrados. Se nota. Y además, en el último segundo. Es natural ...
Pero a mí no me preocupa lo que he visto. Seguimos teniendo consistencia y seriedad. Hay equipo. Cuando se recuperen los lesionados, Vicente del Bosque estará más relajado. Podemos seguir confiando en nuestro equipo nacional. Cuando retorne el tono físico y las bajas que tiene, sé que volverá la magia. A pesar del pinchazo a uno final, la Selección sigue mostrando solidez y poderío. No hay que preocuparse, aunque no haya sido la mejor noche. Estas cosas pasan hasta en las mejores familias futbolísticas.
-VOLVERÁ LA SONRISA-
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