Teatro, sinceridades, excesos, exageraciones, y espacios en medio de una gran verdad común. Los seres humanos somos emociones en acción constante. La verdad y la sabiduría del teatro eterno, y de la sacra máscara representativa y conductual.
Saltos, gestualidades, muecas, cambios, anhelos, deseos, lloros, viajes, y espacio propio y grato. Cómicos libres, actores, humoristas, creativos, luchadores, emprendedores, vagos, taimados o insolentes.
Todo el abanico lleno de la condición humana. La eterna historia representada y del vivir de los hombres y de las mujeres. Grescas, abrazos, besos de amor, caras de lascivos, pícaros, truhanes, mujeres sin escrúpulos o bailarines del casino del dinero. Avaros de Molière. Show.
Sorpresa, contagio, piel vulnerable, imitación de los animales, gato alado, engañado por uno mismo, la coherencia, la vanidad o la gran soberbia.
La guerra o la paz, el grito o el grillo, la admiración de la belleza o la prostitución de unas formas atractivas. Los cimientos de la casa de uno mismo, el amor a lo nuestro, la aceptación y la verdad. Distancia y cercanía.
La poesía y la sabiduría, la prosa de las matemáticas, la pasión comediada y el amor sincero. La trascendencia y la televisión. La novia o el cómplice, el cornudo y la insegura, el amor amical y el filial, la necesidad de querernos y de ser auténticos, la idea de las familias y de las protecciones cercanas y evidentes. El mundo del gen en el corazón recurrente y necesario de la experiencia. Atreverse a amar. Placer y dolor de todos.
Público, ágora, plaza pública, convocatorias y consensos. Acontecimientos y fiestas. Errores y magias, genios y aprendices de aquelarres, grandes viajes a ninguna parte, los ojos de la psicosis y la sonrisa fuerte del atleta vencedor. Tirano del músculo exitoso.
Hedonismo y espiritualidad, ateos y creyentes, radicales y moderados, dualidades y reyes, científicos y zoquetes, agricultores y negociantes, banqueros y mafiosos, trabajadores y clases sociales, ricos y cocaína, verdad sincera y mentira virtual a un solo clik.
Americanos y lapones, distintas lenguas y lugares comunes, colores de todo tipo y aceptación, y muchos más globos pluriformes y de colores. Una olla de vida que se mueve, un volcán de novedad y creación, un verano de amor adolescente, y hasta una definitiva y traumática separación. Ciao.
Vecinos molestos, canes consentidos, señoras de buen ver, musculitos de gimnasio, usurero de crisis ventajera, solidario que se va al quinto mundo a dar toda su ética, inconformismo, heterodoxia y rebeldía. Siempre el amor.
Divas, excesos, gigantes, feos, tullidos y modelos de revista. Actrices de nuestros sueños, extraños visitantes de la noche que no precisan ventana sino aceptación femenina, corrupción y mordida, marchas incesantes camino de la libertad del ciudadano. Cadenas rotas inservibles en el suelo. Terreno vivo.
Puro teatro. Del bueno. Del comprometido, del sin género, de toda ralea, de toda la creada libertad, de toda la pulsión humana, sobresaliente, cutre, deleznable, facha o rojo. Ideología con olor a tomillo y a incienso, payaso de mayor, actor niño, aplauso en las dos manos, y entusiasmo en el gesto del espectador. Cine, música, todo arte, teatro, y como te dé la gana decírtelo a tí mism@.
-TODA TU VERDAD-
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