Ya hace tiempo que huele a Mundial de fútbol. Seguramente, desde que la Liga concluyó.El fútbol es nuestra gran religión, secreta y explícita a un tiempo.
Han pasando ya cuatro años desde el Mundial de Alemania y Austria. Ahora le toca a Sudáfrica ser sede. África. Es la primera vez que el Continente del hambre, es sede de unos Mundiales.Casi es un milagro que se hayan acordado de esa inmensa Sudáfrica, cuyo rey sigue siendo el mito Nelson Mandela. Seguramente, se han acordado de Mandela los prebostes de la FIFA. La nueva Sudáfrica. Extensa, tremenda, pobre, con enormes desequilibrios, sometida durante muchos años por los blancos, pero seguramente uno de los pocos países africanos que económicamente pueden prosperar y desarrollarse.
El dinero del Mundial, el impulso inevitable del evento, y los ojos puestos en ellos, ayudarán al menos por un tiempo. Sudáfrica, sin duda, tiene ante sí un enorme reto que le puede salir bien a poco que la suerte le acompañe. Seguro que sí. África se abre al poder del fútbol. Es una forma como otra cualquiera, de que fluya el tesoro del dinero más necesario que nunca.
En cuanto a lo futbolístico, ya casi no recordamos que hace cuatro años, en la final del cabezazo de Zidane a Materazzi, Italia se hizo con el título. Actual campeón.
Los actuales aspirantes son los de casi siempre. Brasil, Alemania, Italia, Argentina, y esta vez, España. España parte como gran favorita. Tenemos la mejor generación de jugadores de todos los tiempos, y nuestro fútbol sigue encandilando. Somos, además, los actuales campeones de Europa. La "roja", podría levantar el trofeo de campeón, en el país más al sur del Continente africano. Un sueño bien posible.
Por ahora y hasta el día 11, que es cuando empezará a rodar el balón, el olor a mundial nos lo ofrecen los diferentes medios de comunicación a través de sus conexiones y crónicas, ya sobre la tierra de Nelson Mandela. Que si, camisetas, llegadas de los equipos, la nostalgia y evocación de los otros mundiales en imágenes y en nuestra memoria, Pelé, Maradona, Cruyff,Di Stéfano, Franz Beckenbauer, el malabarismo brasileño, la estrategia italiana, la Alemania infatigable, la tradicional Inglaterra y su glamour, etc. La espectación previa.
A miles de kilómetros de nuestro país, va a empezar todo un enorme circo de bullicio, dinero y deporte. Donde Cristo perdió la gorra, y en donde sobrevivir no es nada sencillo, los señores poderosos del balón y la publicidad, se disponen durante unas semanas a aparcar, y contarnos toda una exótica historia de pasiones encontradas. El fútbol mundial se posa sobre Sudáfrica. ¡Enhorabuena!
- ¡ABRAN GOLES, SEÑORES! -
2 comentarios:
Todos con la furia de amberes¡¡
amunt¡
Amunt, amic anonimo!
Abraços ben grands!
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