Sábado de reflexión. ¿A quién quieres más?, ¿a Rubalcaba, o a Rajoy?, ¿a solo estas dos fuerzas políticas?, ¿bipartidismo comercial, hambriento y necesario?
Reflexionar. Verbo excelente. Siempre es saludable el reflexionar. Y no solo en la jornada de reflexión. ¿Votar?, ¿no votar?, ¿demás opciones en la mecánica de voto?
Los ciudadanos hemos usado este año la Democracia, mucho más que otros. Y la idea pionera española de la Spanish Revolution, camina ahora con pujanza por el americano puente de Brooklyn. La gente, se ha movido mucho en estos últimos tiempos. La asfixia del paro y del recorte social, ha generado explosiones sociales en cadena. Ésa, debería ser la llama de nuestro futuro y esperanza. Lo es ya.
Pero, mientras tanto ... Mientras tanto, tenemos aquí una lucha encarnizada entre el politicismo clásico y convencional, y el economicismo más inhumano. Sí. La democracia clásica, la participación del ser humano en las decisiones de conjunto, anda atacada por las dentelladas bárbaras de un capitalismo sin humanidad y sin elementos legales en su contra.
Estamos realmente en peligro. En peligro de convertir nuestros Estados y sociedades, en anécdotas románticas asfixiadas por la presión de los individualismos privilegiados. Banqueros, financieros, etcétera. Es decir, los de siempre...
¿No votar a esas marionetas que dan la cara y se llevan las leches,-que son los políticos-, es una buena táctica? No. No lo creo en absoluto. Al revés. Yo pienso que no votar, no es otra cosa que decirles sí a todo a quienes están convirtiendo nuestro futuro en una desesperanza. Reflexiono en torno a esta idea. Lo mejor que le puede pasar al Banco Central Europeo, FMI o BM, es que decidamos no votar.
Sí. Les jode que votemos. Que votemos, que nos manifestemos, que acudamos a las manifestaciones, que nos quejemos, que clamemos justicia, y todas esas cosas naturales y espontáneas que el cuerpo nos demanda.
Sí. Les fastidia que estemos y que existamos. A los Poderes reales les toca la nariz, nuestra presencia y reivindicación. Por éso deberíamos votar mayoritariamente. Somos más. Somos todos. Somos, la inmensa mayoría. Existimos y tenemos derecho a tener derechos.¡Debemos defender la Democracia!
No veo otra forma de atacar los problemas que nos sueltan y agreden. Apretar a los políticos, también es apretar a los Poderes del dinero. Más que votar, es estar. Más que ganar, es soñar. Más que cambiar las cosas, es participar en éllas. Más que ser felices, es plantar cara a quienes no nos dejan sobrevivir.
Sí. El cambio ético es ahora el voto en una urna, la acción directa de nuestra mano en el Poder es una participación masiva, y nuestro beso electoral es un corte de mangas ante los dueños fascistas del Tesoro Mundial y de sus reglas.
-VOTA Y GANARÁS-
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