No nos engañemos. Estar enfermo es una putada. A pocos les gusta estarlo. Buscar la vertiente positiva de la insólita e inesperada situación, se antoja bastante imposible.
Sí. Cuando te pones malo, todo está más raro. Se ralentiza, y te saca de tu quehacer cotidiano. Y, a tus jefes, cuando te ven con la mosca mala en el rostro, se les pone cara de vinagre frustrante e incomprensivo. "Ya empezamos", suelen pensar ...
Aburrimiento. Yo, cuando me pongo malo, es que me aburro soberanamente. No puedo estar quieto. Y cuando veo que no debo, y que tengo que guardar santo reposo, es que me entra el yuyu del ocio y no logro concentrarme en nada. Se pasa mal.
No se me ocurre poner la televisión a cualquier hora. Éso, es terrible. No sabes lo que te sale por la caja de cristal y hablando de chafarderías. Es mejor no tener tele si te pones malo, y así te dejas de tentaciones y tontadas.
Te viene la gripe, y te desconcentras. La tele, potencia tus vulnerabilidades de salud. Las agrava. No se puede ver cuando estás bien, como para ponerte a ver éso cuando te entra la fiebre o te sientes cansado. Cuando te encuentras mal, la radio es mucho mejor y tiene algunas ventajas. Porque, aunque no te enteres de lo que habla el locutor y sus invitados, es como su alguien entretuviese tus oídos, y éso propicia el que te entre el tabardillo, sudes, y se sobrelleve mejor tu recuperación. Si la emisora no lleva música, mejor que mejor. Ya lo sabéis.
Se suele dormir mejor si estás malo. El paracetamol y los antibióticos, te confieren una cierta seguridad de laboratorio. Y, sabes, que el médico siempre estará ahí. Y quién sabe, si se agravan las cosas, y entonces es una real médica quien viene a verte a tu propia cama. Solo con verla, te viene el sueño del revivir. Te curas. Fijo.
En Cataluña, aparece en el enfermo alguna que otra vertiente preocupante y hasta patológica. ¡El copago! Sí. Te quieren cobrar a céntimos los medicamentos, porque los gobiernos no pagan a los boticarios. En ese lugar, el enfermo está más desprotegido por ahora que en cualquier parte de España, como puedan ser las Islas Canarias. Lo que pasa es que el europeo catalán suele estar curtido en mil batallas. La "pela", es decir, el dinero, es en el territorio catalán un valor real y riguroso. Suelen ser menos románticos. Generalizando, claro está.
Pero, ojo, que se malicia que Rajoy quiere hacernos poco a poco lo mismo a los demás. No cantemos derrota. Nunca se sabe. Ojalá, no.
Sí. Lo mejor de estar enfermo es que te puedes evitar a gente cotidiana que no tragas, y éso desestresa que no veas. Es otro tiempo y otro lugar. Es una nueva cárcel que no tiene orígenes capitalistas sino biológicos, y seguramente por no llevar una alimentación sana y equilibrada. Depende.
Os pongáis como os pongáis, lo mejor de todo es estar sano y que no se prolonguen las convalencencias. Coñe. Levantarse por las mañanas como un roble y dispuesto a todo, es una buena señal. Y entonces, más que nunca, te das cuenta de lo guapas que son las chicas y de lo fuerte que brilla el sol.
-SIENDO REALISTAS-
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