Ayer vi una entrevista al tristemente fallecido en la plenitud de su vida,hecha al cantante Michael Jackson.Ne quedé de piedra.Veréis.Era un niño.Tenía 50 años y vivía en su disneylandia particular.Literalmente,un niño.Un niño solitario,lleno de miedos,inseguro a mil,con una falta demoledora de cariño real y tantas tantas cosas...
Michael hablaba como un adolescente tímido;como un chiquillo asustado.Negaba cosas evidentes,confesaba cosas inconfesables, y tenía la rabia bien metida adentro.Y estaba, itero,completamente solo.Totalmente solo y desnudo frente a un mundo de tiburones.¡Qué pena!
Como era un genio y una máquina de hacer dinero rápido,te lo veías entrando en un almacén o en una tienda de objetos y te decía que "quiero esto,eso no,este sí",y daba igual el dinero que valiese lo comprado.Lo pagaba.
Los vendedores le miraban nerviosos y felizmente asustados por las ventas,pero es que su comprador era nada más y nada menos que Michael Jackson... Sencillamente,increíble.
Ayer pensé mucho en esa familia que nunca tuvo el genio del Pop, y en los fans y admiradores.Pude reflexionar en frío sobre sus fans.Y sobre la idea de seguidores incondicionales.Todo,mentira.El mejor fan debe ser uno mismo.Lo demás,es menoridad.
Lo que verdaderamente me jodió viendo el reportaje donde se veía hablar sinceramente a Michael,fue comprobar que el capitalismo está configurado de tal substancia de indiferencia,que genera atmósferas en las que caben juguetes rotos,pero millonarios y capaces de generar money.Money,money,money...
Para todos eso era Michael Jackson.Money.Una fábrica de dinero rápido.No le querían.Pasaban de él.Se le reían.Le despreciaban.Aunque luego bailasen enloquecidos por la magia genial de sus conciertos.
Le marginaron, le obviaron como persona, le anularon como ser humano,le dejaron caminar una y otra vez por el precipicio maldito de su locura, hasta que se dió la gran leche y se lo encontraron todos muerto.
Sí.Estas son las reglas del juego.El ser humano pinta poco aquí.Quien pinta es el artista,su capacidad creativa y de generar concentración de masas expectantes.Lo que mola es el personaje y su música.Nunca importa el ser humano que hay tras el personaje.
Tras ver el reportaje,sentí que no podía envidiar al genio que con su música me había hecho soñar.Le habían convertido en un mero producto.
-LO SIENTO DE VERAS-
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