Sí. Ciudadano de la ex República Árabe Saharáui Democrática. Ponme el nombre que quieras. Antes, yo era español. Ya sabéis: El Sáhara español. Una colonia de los europeos españoles. ¿Amigos? ¡Quiá!...
Era el año setenta y tres creo. Teníamos fosfatos. Y el fosfato es muy tentador. Nosotros somos gente de jaima y desierto, y apenas interesábamos a nadie. Pero nuestros fosfatos son muy golosos.
Bueno. Digo nuestros, por decir algo. Porque ahora no somos nada. No pintamos nada para nadie. Las disposiciones internacionales acaban siendo papel mojado. ¿Os acordáis del plan Baker?, ¿a que no? Estamos a merced de unos y otros. Somos un pueblo violado. Nos han robado la tierra, y nos han llenado tanto de marroquíes, que ya es difícil saber quién es o no es saharáui, sino fuera por nuestra eterna actitud de rebeldía audaz de pueblo que no quiero morir y al que se lo han hurtado todo. Empezando por la libertad.
El año creo que setenta y tres, fue muy duro para nosotros. Todavía éramos o pertenecíamos a los europeos españoles, y va y su Caudillo se puso malo para morir. Y entonces, España nos traicionó. Veréis. El padre del actual rey de Marruecos, que se llamaba Hassan II, aprovechó para invadir por completo nuestro territorio. Y va, y los españoles en vez de frenarles, les dejaron pasar como Pedro por su casa. Nos traicionaron vilmente. Ya sabéis: la famosa "Marcha Verde". Y los españoles, se fueron. Y nos dejaron a merced de los invasores del sanguinario Hassán. Y se quedaron igual. Y nuestro combativo "Frente Polisario" era una pequeña hormiga, para defendernos del gran elefante marroquí e invasor.
Los americanos tenían algunas llaves de justicia. Pero ya sabéis lo que sucede cuando se trata de economía y de intereses todo, y de cuando es cosa de decantarse por ricos o pobres, o por grandes o por pequeños. Y los americanos decidieron no hacer nada. Y consentir, y seguir consintiendo nuestra paulatina muerte y desaparición. Son las reglas del juego del mundo. Y, encima, mandan cascos azules para "pacificar". Los mismos que consienten nuestra muerte,dicen que vienen a pacificar. De risa.
Nosotros los saharáuis no es que seamos héroes ni cosas extrañas. Lo que pasa es que no tenemos apenas nada que perder, y vivimos en jaimas o tiendas en medio del desierto perdido y a la vez maravilloso, y con los marroquíes apuntándonos en la cabeza y no dejándonos respirar. No hagáis caso si nos llaman héroes. Solo lo hacen por peloteo y por limpiarse hipócritamente sus sucias conciencias.
El otro día sufrimos un nuevo ataque marroquí, y sobre la población civil. Las órdenes que ellos reciben, son contundentes. Los saharáuis no tenemos que tocar las pelotas ni exisitir. Para éllos, debemos morir y sin hacer ruído.
-PONME EL NOMBRE QUE QUIERAS-
4 comentarios:
Hoy todos somos sarahuis.
Un beso.
Así es, amiga Honey. Besos!
España traicionó a los saharauis y el entonces Jefe de Estado en funciones, traicionó a España.
Pídele cuentas al rey, saharaui.
Anónimo prosáharaespañol
Ahí queda reflejado tu comentario,prosáhara.
Mil abrazos!
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