Sí, amigas y amigos que me leéis. Hoy tenía ganas de hablaros, y desde la cercanía. Hoy no tocaré ningún tema de actualidad, ni os contaré un relato, ni os lanzaré mis juguetonas "Noticias del Disparate". No. Hoy quiero hablaros a vosotr@s.
Estoy muy contento en estos primeros días de Septiembre. Veo que me seguís, a pesar del parón del verano. Y yo, halagado naturalmente. Quiero destacar a mis paisanos lectores españoles, y felicitarme por el éxito de mi blog en Méjico y Colombia. Hermosa e ilusionante pugna entre los hermanos mejicanos y colombianos, bien igualados en el seguimiento de mi modesto y juguetón cuaderno de bitácora personal. Mi blog sigue navegando firme y seguro. Y, no. No me dejo a todas las amigas y amigos argentinos, peruanos, guatemaltecos, chilenos, venezolanos, nicaragüenses, y de tantos y tantos países de habla hispana que decidís leerme con absoluta libertad.
Y ahora, deciros que no me dejáis apenas comentarios, picando debajo de los escritos. La última persona que lo ha hecho, que ha sido la simpática lectora española que se apoda "Obexa", me ha dado una alegría natural y fuerte. Ha sido muy gentil.
Sinceramente, me haría ilusión que mis lectores colombianos, mejicanos, o de cualquier otra nacionalidad, pusiéseis siquiera un saludo. Os aseguro que eso le daría más sangre y fuerza a mi blog. Estad seguros. Mi sonrisa, se iluminaría todavía más.
¿De qué ciudad me escribes, amig@ de Colombia?, ¿desde dónde procede tu lectura, buen mejican@? Venga, animaros. Y ya no os insisto más. Es vuestra libertad, y la acepto y respeto. ¡Adelante, paisanos españoles!
Lo importante es que estamos todos ahí, y cada vez os siento más fieles. Empezáis a ser mis lectoras y mis lectores. Os confieso que jamás pude soñar tanta alegría. Soy un hombre modesto, mi blog lo es asimismo, no soy un escritor al uso y solo espero algún día ser aspirante a ese podio, no tengo estudios universitarios, etc, y ésto, me hace apreciar más vuestra actitud fiel. Os quiero mucho más, porque soy poquito.
José Vicente, Valencia. España. Hijo de obreros. Cincuenta y un años. Y, tremendamente ocurrente y juguetón. Me considero una persona en crecimiento constante, y por lo tanto, en evolución permanente. Pongo el corazón en cada palabra que leéis, y quizás por éso llego a vosotr@s. Porque me sale un escribir fresco y espontáneo, porque de siempre me ha gustado escribir, porque siempre siento la necesidad de lanzar al escrito mis sentimientos más naturales, y porque si encima, gusta lo que os pongo en vuestro ordenador, mil sobre hojuelas y objetivo cumplido. ¡Mil gracias a todas ya todos por seguir ahí!
-BESOS Y ABRAZOS DE JOSÉ VICENTE-
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