
Una casa. Muchos años así. No hay milagros. Es una casa fría, que solo puede oler a derrota, a inercia, a inacción, a tiempo que no pasa, y a heridas cuya cronificación hace que el efecto nocivo se amplíe y multiplique.Sé que existe esa maldita casa. La he visitado en muchas ocasiones. Y cada vez, creo sacar de ella más terroríficas conclusiones. Sí. Esa casa no se mueve. Nunca parece pasar absolutamente nada, aunque en realidad,-dado que está habitada-, produce siempre muchas cosas y feas...