martes, 29 de julio de 2014

- JORDI PUJOL Y LAS NEFASTAS TENTACIONES DEL PODER -



Me asombra que le pasen estas cosas a un gran páter de la política. Parece que el actual padre de Cataluña es un ladrón.
Más que evidente, parece. Pujol y su familia amasaron una fortuna en todo este tiempo histórico, que va desde la Transición hasta nuestros días. Hay gente muy desolada y decepcionada. Catalanes, sobre todo. Se sienten realmente burlados y engañados. ¿Cómo ha podido pasar todo esto? ¡¡Collons!! ...
Porque, además, el carisma del padre moderno de Cataluña tras el fallecimiento del advenido Josep Tarradellas, era más que evidente. Pujol era gesticulante, y educado, y muy solemne, y muy sereno y tranquilo. Aglutinador y con una personalidad potente y ganadora. Era una atracción bien catalana, práctico, avanzado, pragmático, nada radical, que nunca hacía estridencias y que parecía odiar los grandes gritos y los sonoros desacordes. Las escandaleras.
Por eso, su partido Convergència, tenía la pegada de la actualidad y de la cercanía. Catalunya es un gran pueblo. Dirigirles, no podía ser nunca cosa baladí. Es un lugar fuerte y europeo, una máquina de impulsos y de negocios, una burguesía culta y con orgullo, y todo bien suyo y diferente. Hablan catalán, y tienen unas raíces propias a las que nunca van a renunciar.
Pujol. Nada menos que Jordi Pujol. El ex Molt Honorable President de la Generalitat. Un cargo brutal y de cumbre; toda una institución que forma parte de la ilusionada Historia democrática que tenemos.
Pujol se creyó sin rivales. Siempre ahí en el Everest del éxito. En todo momento con el bastón de mando y amigo de los grandes próceres políticos, y banqueros, y financieros, y de todas las atalayas y grandes miradores. Aquello debía ser para el actual anciano Pujol algo alucinante. Como el tener derecho a todo. Y parece que bien que se pasó de la raya como los de la trama Gürtel y los dineros ocultos en los paraísos fiscales tan en diferido e inanemente explicados.
Debe ser fascinante todo el gran esoterismo del Poder. Porque lo de Pujol ha sido Poder con mayúsculas. Ha sido el tipo con más influencia de Catalunya ejerciendo su magnitud de escalafón y con la contundencia de un guerrero aparentemente amansado. Sin concesiones para nadie. Pujol nunca ha sido fácil. Un tipo raro y hasta esquivo. Y tremendamente escurridizo y seductor. Un excelente mago de los sentimientos de los suyos, para luego acabar haciendo caja y poniéndose las botas.
Asombro y decepción. Son las palabras. El President tenía una cara b, terrible y demoledora. Se aprovechaba de las coyunturas y del temor que había dentro de su propio Partido para ir sacando las pelas camino de su propio patrimonio personal... ¿Será granuja? ...
Para mí, lo más significativo son y serán las grandes complicidades y las grandes redes que urden los tipos perversos como él. La capacidad de establecer elementos de intocabilidad bien evidentes. Las nefastas adhesiones. Pujol llevaba treinta y pico años llevándoselo crudo, y nadie parecía enterarse de nada ...
Sí. Cloroformo. Pujol tiró la capa de anestesia golfa, y cayeron casi todos. Porque de otro modo no podría comprenderse la gran decepción. Solo podía serse tan suelto si se decidía mirar hacia otro lado. Si se tenía la evidente sensación de impunidad. Si no había suficientes periodistas comprometidos, si los investigadores de los dineros se dejaban llevar en canoa tranquila, e incluso si sus socios en la política debían de tenerle un cariño demoledor. Como a un tirano vestido de sentimientos de demócrata.
Es lo más preocupante. Como los de la Gürtel, los ERE andaluces, y quien haga falta de ejemplos. La impunidad, las facilidades, que pasaban los años y nadie daba con el pez, que faltaba coraje y potencia social, que todo valía o parecía valer. Y eso es exactamente lo que esperan los grandes ventajistas.
-UNA ENORME AUTOCRÍTICA Y UN MITO QUE CAE-

0 comentarios:

Publicar un comentario