miércoles, 10 de febrero de 2010

- MIS CHARLAS CON ... ¡LA MÚSICA! -

EL MAGO: ¿Sabes,Música? Me relajas y me das una paz increíble...
LA MÚSICA: Lo celebro, mago. Me gusta gustar...
EL MAGO: ¿Recuerdas cuándo viniste al mundo,amiga Música?
LA MÚSICA: ¿Yo? Seguramente cuando alguien decidió hacer ruído y ponerle ritmo,mago... Yo no soy de fechas. Soy eterna,¿lo sabías?
EL MAGO: Solo sé que me gustas,"Música". Como si fueses una chica bien hermosa e inquieta...
LA MÚSICA: ¿Te gusta bailar acaso, poeta?
EL MAGO: ¡Claro,Música! Pero sin ti no podría hacerlo,¿sabes?
LA MÚSICA: Me acabas de dar una idea,mago. La de bailar en silencio,¿qué te parece?
EL MAGO: No sé,Música. Eso de bailar en silencio me suena un poco a ceremonia fúnebre,¿no piensas como yo?
LA MÚSICA: ¿Y por qué iba yo a pensar como tú,mago?
EL MAGO: Buena respuesta,Música. Tú piensa lo que quieras y lo que te dé la gana...
LA MÚSICA: Lo que pienso,mago, es que en tus ojos hay sinceridad. Creo que te gusto realmente. ¿Te gustan todas las músicas acaso,poeta?
EL MAGO: Preguntona que me sales,Música. Te cuento. A mí me gustan los clásicos de la música ligera en España, y la Copla. Me gustan, ya sabes, Serrat, Sabina, Carlos Cano... Pero también Concha Piquer y Diana Navarro, ¿sabes?
LA MÚSICA: Comprendo,mago. ¿Y qué te parece la música clásica?, ¿no te gusta?
EL MAGO: Verás,Música. El otro día se me ocurrió poner un CD de María Callas, y coñe,eso es magia...
LA MÚSICA: Lo es. Se dice,poeta, que esa mujer era capaz en sus agudos de hacer añicos los vasos de cristal, je,je,je,je...
EL MAGO: ¿Tu principal enemigo es el silencio,Música?, ¿qué piensas?
LA MÚSICA: No. Mi principal enemigo es que os pongáis tristes los humanos. Pero, os veo con recursos. Ya sabes aquello de: "quien canta, su mal espanta"...A veces, cuando no estáis muy allá, os da por hacer música. ¡Enhorabuena,mago!
EL MAGO: Yo pienso,Música, que en realidad tú eres una elitista. Necesitas una técnica, un compás, un ritmo, una armonía construída... No eres tú una chica sencilla me temo,Música...
LA MÚSICA: Te equivocas de plano,mago. No necesito tantas sofisticaciones para salir. Puede haber música en el trinar de un pájaro, en el sonido del viento, en el llanto de un bebé, en la cascada de un río, en la percusión de un africano sobre cualquier tronco..., en mil cosas simples y bien baratitas, mago...
EL MAGO: ¿Y tú,Música?, ¿cuál de todas las músicas prefieres?
LA MÚSICA: ¿Preferidas? Pocas o ninguna. Todas las músicas están bien. Pero si me apuras te diré que la música que no soporto es la de las guerras. Me refiero a los cañonazos y las bombas. ¡No aguanto a la muerte,amigo mío! ...
EL MAGO: ¿Te has parado a pensar acaso lo que es la Música celestial,amiga?
LA MÚSICA: Claro. Eso es un deseo. Como un ascensor que os lleve en volandas al cielo. Pero yo no soy muy partidaria de esa música,mago. Yo prefiero que seas tú el que haga la música, y no que te la den hecha, ¿estamos,poeta?
EL MAGO: ¡Estamos,Música! Fíjate: cantar,bailar,las melodías..., ¿todo eso es música?
LA MÚSICA: Como si lo fueran. Pertenecen a la misma familia de las emociones expresivas en acción, mago...
EL MAGO: Ha sido un verdadero placer compartir un ratito contigo,Música...
LA MÚSICA: Pues a mí no me has convencido demasiado,mago. No me has cantado, ni me has bailado, ni has entonado nada rítmico...
EL MAGO: ¡Qué sagaz eres,Música!
LA MÚSICA= Pero no te sientas mal, mago. Tienes un hablar muy dulce y bello. Ahora comprendo porqué te haces llamar poeta...
EL MAGO: Un día te soprenderé,Música. Bailo con más ritmo que los africanos del Caribe,¿qué te parece?
LA MÚSICA: Que, si no lo veo, no lo creo. ¡Besos, mago!
EL MAGO: ¡Mil besos musicales para ti! ¡Muaks, amiga!...

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